Eduardo Barriobero y Herrán – anarquista fusilado en
Barcelona
El 7 de febrero de
1939 es fusilado en Barcelona (Cataluña)
el abogado, periodista, escritor, político republicano federal y militante de
la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) Eduardo Vicente Anacleto Barriobero
y Herrán. Había nacido el 29 de julio de 1875 en Torrecilla en Cameros (La
Rioja, España) y fue el mayor de cinco hijos del matrimonio formado por el
militar Juan Francisco Barriobero y por la maestra María Herrán. Su infancia
discurrió entre las villas rurales de Torrecilla y de Entrena, donde su madre
hacía de maestra. Más tarde hizo el bachillerato en el Instituto de Segunda
Enseñanza de Logroño y ya empezó a tener aficiones literarias. Se trasladó a
Zaragoza, donde estudió Derecho y Medicina. Admirador de Francisco Pi y
Margall, se afilió al Partido Republicano Democrático Federal (PRDF) y
frecuentó el Círculo Republicano de Zaragoza. Fue uno de los fundadores de la
Juventud Republicana Federal (JRF).
En 1895 terminó
Derecho, pero abandonó los estudios de Medicina. Se instaló en Madrid, con la
intención de realizar oposiciones y obtuvo el número uno en el concurso en el
Registro de la Propiedad, que lo convirtió en el miembro más joven del cuerpo.
Destinado a San Martín de Valdeiglesias (Madrid), se conoció su futura esposa,
Araceli González, acomodada terrateniente, de esta unión nacerían dos hijos,
Eduardo y José. El matrimonio, sin embargo, fracasó y se produjo la separación,
tras lo cual, se instaló en Madrid con el fin de ejercer la abogacía, la
literatura y el periodismo. El 20 de enero de 1901, como militante de la Unión
Democrática, participó en un mitin contra el impuesto de consumos, en ese año
comenzó también a colaborar en Madrid Cómico. El 30 de noviembre de 1902
participó en un mitin de la Federación Revolucionaria para conmemorar el
aniversario de la muerte de Pi y Margall, en esta época haga amistad con el
médico anarquista Pedro Vallina. Entre febrero y noviembre de 1903 dirigió la
revista semanal Germinal, donde publicó textos anarquistas. En esta época
colaboró en diversos periódicos y revistas, como Heraldo de Madrid y Fuerza.
En noviembre de 1903
fue detenido por participar en una manifestación a favor de unas obreras de la
fábrica de tabacos despedidas y fue encarcelado dos meses. En febrero de 1904
publicó artículos en la revista radical Alma Española. Perseguido, tuvo que
huir a Francia, donde vivió exiliado con la ayuda de Nicolás Estévanez, ex
ministro republicano que le puso en contacto con varias editoriales para
traducir autores franceses, con el dinero obtenido, hizo un viaje por Europa. Retornó
a la Península cuando se produjo la catástrofe del Tercer Depósito - el 8 de
abril de 1905 se hundió un depósito en el Canal de Isabel II y 300 personas
quedaron sepultadas - y organizó la protesta popular, que el llevó a la cárcel
cinco meses, enfermando de la vista gravemente. Una vez liberado, participó
activamente en la conmemoración del tercer centenario del Quijote dentro una
corriente de interpretación libertaria (Cervantes de levita y Nuestros libros
de caballería); paralelamente publicó la primera edición del Gargantúa, primera
traducción al castellano de la La obra de Rabelais - para la edición de 1910 el
gobierno francés le concedió la Legión de Honor. En 1906 empezó a colaborar en
Revista Contemporánea y sacó la novela Guerra y algunos episodios de apoyo vida
milagrosa.
El 9 de junio de 1906
publicó un folleto en defensa de José Nakens, el célebre director de El Motín,
a quien exculpaba de la ayuda prestada a Mateo Morral en el atentado contra
Alfonso XIII y defendía la tesis del «anarquismo científico », el libreto fue
secuestrado y Barriobero fue cerrado seis meses en la Cárcel Modelo. En la
cárcel conoció Francisco Ferrer Guardia. En 1907 se inauguró en la práctica
forense defendiéndose de un delito de imprenta y se integró en la Asociación
Libre de Abogados. En 1908 participó activamente en mítines anarquistas contra
la «Ley de las Cadenas" - proyecto de ley antiterrorista de Maura, que
finalmente fue retirado el 3 de junio. Ese año comienza a colaborar en la
revista barcelonesa Acracia, y defendió Herminio Cerrillo, autor de dos
asesinatos, que le dio fuerza prestigio. También publicó la zarzuela Juerga y
doctrina. En 1909 colaboró en Tierra y Libertad, dirigida por Anselmo
Lorenzo. Junto con Zamacois y Ernesto Bark, vivió la bohemia y formó tertulia
en «El Café de la Luna». El 10 de abril de 1910 intervino en un gran mitin
radical preelectoral y se presentó a las elecciones como candidato del Partido
Republicano Radical en Martos (Jaén), pero no salió elegido. Después integrarse
en la redacción de El Radical, como cronista de tribunales. En esta época
intervino en mítines y veladas republicanas, donde hizo gala de su anarquismo.
También colaboró en el semanario republicano La Pelea.
A raíz de las huelgas de Gijón de 1910 y 1911 intervino como
defensor de presos sindicalistas y anarquistas (Antonio Vega, Eleuterio
Quintanilla, Pedro Sierra, Emilio Renduelos, Marcelino Suárez, Francisco
Fernández, Baltasar Colón, etc.), Acusados de atentar contra los patrones.
Tras los Hechos de Cullera - movimiento huelguístico anarquista que se produjo
el 18 de septiembre de 1911 y que acabó en insurrección -, que originaron
numerosas detenciones de anarcosindicalistas, en defendió el responsable más
significativo, Joan Jover Corral (Chato de Cullera), la condena a muerte del
que fue suavizada por un indulto real. En 1911 publicó La Cofradía de los
Mirones y dirigió el periódico anticlerical La Palabra Libre. En 1912 se afilió
al Sindicato de Profesiones Liberales de la CNT y como abogado de este sindicato
prestó asistencia gratuita a los obreros encarcelados, como Joan Ferrer
Farriol, Luis Bulffi, Francisco Cardenal, Josep Coll, etc. Desde enero de 1912
perteneció a la masonería (Gran Oriente de España), con el nombre de
Alcibíades. En 1913 defendió Rafael Sancho Alegre, anarquista barcelonés
acusado de regicidio frustrado contra Alfonso XIII, y campesinos gallegos
acusados de atentados contra los caciques. En julio de ese año firmó el
manifiesto de creación de la «Liga Española para la defensa de los derechos del
hombre».
También ingresó en el Partido Republicano Federal, mostrando
la doble militancia cenetista y republicana, y del que fue elegido diputado a
Cortes por Madrid. Instalado en la capital del Reino, dirigió Juris y colaboró
en la revista anarquista de Gijón Solidaridad. En 1915 realizó una gira de
propaganda en favor de los presos de Cenicero (La Rioja) y colaboró en Tierra
y Libertad. En 1917 defendió judicialmente campesinos gallegos contra los
caciques. Entre 1918 y 1919 dirigió el diario republicano El Parlamentario y
colaboró en El Soviet, de Madrid, y en el Comunista, de Zaragoza, de
tendencia anarcosindicalista. En 1920, además de su importante labor
parlamentaria, participó en la redacción del periódico madrileño Hoy y colaboró
en La Libertad, La República, El Rumor Público y otros periódicos. En 1921
defendió numerosos anarcosindicalistas barceloneses y fue uno de los defensor
de los anarquistas que asesinaron Dato. En 1922 publicó la sátira policial y
carcelaria Chatarramendi el optimista o La policía de Botaratoff, Matapan, el
probo funcionariado; y María o La hija de Otro jornalero. Durante la dictadura
de Primo de Rivera fue condenado a cinco años de destierro, que no cumplió
íntegramente, por haber publicado Como los hombres, que fue secuestrada por la
policía. Como abogado defendió García Oliver, Roigé i Figueras Tribó, que en
abril de 1923 habían realizado una "acción punitiva" contra sicarios
del Sindicato Libre en Manresa. En 1923 publicó la edición en castellano en tres
tomos de las obras completas de Rabelais.
En 1925 colaboró en
Diario del Pueblo y La Rioja Industrial. El 24 de junio de 1926 fue detenido en
Madrid con motivo de los episodios de la "Noche de San Juan", cuando
los generales Weyler y Aguilera intentaron un golpe de Estado para «restaurar
el orden y el derecho» y fue cerrado un mes en la Cárcel Modelo. Durante la
dictadura de Primo de Rivera fue detenido más de 10 veces. En 1927 fue
nuevamente detenido como golpista y cerrado durante seis meses en prisión. En
1919 colaboró en la editorial Compañía Iberoamericana de Publicaciones
(CIAP), dirigiendo varias colecciones. En 1930 defendió los encausados en el
proceso del «Puente de Vallecas" - montaje policiaco para acusar
anarquistas de intento de asesinato de Primo de Rivera. En 1931 fue elegido
presidente del Partido Republicano Federal, resultó diputado a Cortes por
Oviedo y comenzó a publicar en La Tierra y en Fray Lazo. En 1932 formó parte
del Comité Ejecutivo de la Alianza de Izquierdas y criticó duramente las
deportaciones de anarquistas (Durruti, los hermanos Ascaso, etc.) En Bata
(Guinea).
En 1933, a raíz de la
tragedia de Casas Viejas, mantuvo un importante debate parlamentario con Azaña.
Durante todos estos años republicanos defendió cenetistas y participó
activamente en varios comités propresos, también abandonó la masonería por su
politización, de la que alcanzó el grado de vicegranmestre y granmestre
interino de la logia del Gran Oriente Español. En junio de 1936 fue propuesto
para la presidencia del Tribunal Supremo, pero sólo aceptó la presidencia de la
Sala Criminal, el nombramiento nunca fue efectivo, ya que estalló el golpe de
Estado de Franco y Barriobero participó activamente en los hechos de Madrid. En
agosto de 1936 fue requerido para ponerse al frente de la Justicia
Revolucionaria de Cataluña, convirtiéndose en funcionario de la Generalitat. En
febrero de 1937 fue destituido, debido a un montaje político, de su cargo de
fiscal del Tribunal Revolucionario de Barcelona. En 1938 enfermó de hepatitis,
de ictericia y de hidropesía. Sin acusación judicial, fue detenido e ingresado
a la Cárcel Modelo, en una clara maniobra de venganza por parte de Azaña.
Excarcelado, fue
ingresado en el Hospital de Sant Pau de Barcelona como detenido, pero con
escolta armada para su protección. En el hospital sufrió un intento de
secuestro y de asesinato. Permaneció cerrado un año y 17 días acusado de
evasión de capitales. Obtuvo la libertad cuando las tropas franquistas entraban
en Barcelona, pero se negó a huir hacia Francia. Una mañana a principios de
febrero de 1939, cuando paseaba por las Ramblas, fue denunciado. Eduardo
Barriobero fue fusilado el 7 de febrero de 1939 en Barcelona (Cataluña) y
enterrado anónimamente en el foso de Montjuïc - oficialmente murió de
«hemorragia interna» el 10 de febrero.