El oficial que asesinó a Víctor Jara reside en EEUU desde
1990
La Justicia chilena
inició el pedido de extradición a EEUU del oficial retirado del Ejército Pedro
Barrientos, procesado como autor material del asesinato del cantautor Víctor
Jara en 1973
El juez de la causa, Miguel Vásquez, quien el viernes
procesó a Barrientos y Hugo Sánchez, como autores materiales del homicidio, y a
otros seis ex oficiales en calidad de cómplices, informó sobre el inicio de los
trámites de extradición para que se complete lo más rápido posible la orden de
captura de todos los inculpados. Barrientos se encuentra viviendo en Florida
desde el año 1990.
“La extradición se está solicitando; se van a hacer los
trámites pertinentes a la Corte Suprema para cumplir el procedimiento y se está
decretando el pedido de extradición”, explicó el magistrado, citado por el
diario online estatal La Nación.
El juez precisó que
“el sentido del pedido de extradición es acelerar la orden emitida el viernes
pasado”, cuando Vásquez pidió la captura internacional de Barrientos.
Además de Barrientos
y Sánchez, el procesamiento recayó sobre los ex oficiales Roberto Souper, Raúl
Jofré, Edwin Dimter, Nelson Hasse, Luis Bethke y Jorge Smith, en calidad de
cómplices.
De todos ellos,
cuatro están detenidos en el Batallón de Policía Militar del Comando de
Telecomunicaciones en la comuna de Peñalolén, uno está internado en una clínica
psiquiátrica y los otros dos no fueron encontrados.
Jara fue detenido el
12 de septiembre de 1973, un día después del golpe de Pinochet, junto a
centenares de alumnos, trabajadores y profesores en la Universidad Técnica del
Estado (UTE), la actual Universidad de Santiago (USACH), en la que se
desempeñaba como docente.
Todos fueron llevados
al Estadio Nacional, habilitado como centro de detención. Ahí, Jara fue
reconocido por los militares, separado de los demás prisioneros y sometido por
varios días a torturas, entre ellas quemaduras con cigarrillos, simulacros de
fusilamientos y la fractura de sus manos con golpes de culata.
El 16 de septiembre
el estadio fue vaciado de prisioneros, con excepción del cantautor y de Littré
Quiroga Carvajal, quien fuera director de la Empresa de Ferrocarriles del
Estado durante el gobierno de Salvador Allende (1970-73). Los dos fueron llevados
a un subterráneo del recinto y acribillados a tiros.
Jara recibió 44
impactos de bala y tenía numerosos huesos fracturados, según determinó el
informe de la autopsia que se le practicó luego de que su cuerpo fuera hallado
en la parte posterior del Cementerio General de Santiago, donde había sido
arrojado por los militares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario