Doce mitos sobre la Acción Directa
Acción directa, esto es, cualquier clase de acción que evita
los canales políticos establecidos para conseguir sus objetivos directamente,
tiene una larga y rica tradición entre los obreros, desde las rebeliones de los
esclavos hasta cuando queramos. A pesar de eso, hay varios malentendidos sobre
ella, en parte debido a las formas en que es tergiversada por las empresas y
medios de comunicación.
1. Accion directa es
terrorismo.
El terrorismo esta calculado para intimidar y así paralizar
a la gente. La acción directa, por otro lado, pretende inspirar y así motivar a
la gente, mediante la demostración del poder que los individuos tienen para
conseguir sus metas por ellas mismas. Mientras el terrorismo es el dominio de
una clase especializada que busca adquirir el poder solo para si misma, la
acción directa demuestra posibilidades que puede usar cualquiera, dando poder a
la gente para tomar el control de sus propias vidas. A lo sumo, un hecho dado
de acción directa obstruirá las actividades de una corporación o institucion que
esta cometiendo una injusticia a ojos de los activistas, pero esto es una forma
simple de desobediencia civil, no terrorismo.
2.La acción directa
es violenta.
Decir que es violencia destruir la maquinaria de un matadero
o romper las ventanas de los partidos que promueven las guerras es priorizar la
propiedad sobre la vida humana o animal. Esta objeción valida sutilmente la
violencia contra las criaturas vivientes enfocando toda la atención en los
derechos de propiedad y la aleja de asuntos más fundamentales.
3.La acción directa
no es expresión política, sino actividad criminal.
Desafortunadamente, si una acción es ilegal o no se
corresponde con si es justa o no.
La leyes de una dictadura son, después de todo, leyes.
Objetar a una acción sobre la base de que es ilegal es
esquivar la cuestión mas importante de si es o no ética. Argumentar que debemos
siempre obedecer las leyes, incluso cuando las consideramos inmorales o cuando
refuerzan condiciones injustas, es sugerir que los arbitrarios pronunciamientos
del sistema legal establecido poseen una autoridad moral mayor que nuestras
propias conciencias, y pedir complicidad enfrente de la injusticia.
Cuando las leyes protegen lo que no es justo, la actividad
ilegal no es un vicio, y la docilidad obediente de la ley no es una virtud.
4. La acción directa
es innecesaria donde la gente tiene libertad de expresión.
En una sociedad dominada por el cada vez más estrecho punto
de vista de las empresas de comunicacion de masas, es casi imposible iniciar un
dialogo publico a menos que ocurra algo que atraiga la atención sobre ello.
Bajo esta condiciones, la acción directa es un medio para cuidar de la libertad
de expresión, no para absorberla.
Así mismo, cuando la gente que se opondría a una injusticia
ha aceptado que es inevitable, no es suficiente hablar sobre ello: una tiene
que demostrar que es posible hacer algo.
5. La acción directa
es alienante.
Al contrario, mucha gente que encuentra la actividad
política tradicional alienante se inspiran y motivan con la acción directa.
Gente distinta encuentra diferentes aproximaciones
satisfactorias, un movimiento ampliamente basado debe incluir un ancho abanico
de opciones.
Algunas veces gente que comparte objetivos con los que
practican la acción directa gastan todas sus energías desprestigiando una
acción que se ha llevado a cabo, haciendo eso traen al derrota arrancándola de
las fauces de la victoria. Harían mejor buscando la oportunidad para centrar
toda la atención en los asuntos puestos de manifiesto por la acción.
6. La gente que
practica la acción directa debería trabajar a través de los canales políticos
establecidos.
Mucha gente que practica la acción directa también trabaja
dentro del sistema. Un compromiso para usar cada medio institucional disponible
para solucionar los problemas, no excluye necesariamente un compromiso igua,l
de elegir otros medios donde los anteriores no son suficientes
7. La acción directa
es exclusiva.
Algunas formas de acción directa no están abiertas a todo el
mundo, pero eso no significa que no tengan valor.
Cada una tenemos diferentes preferencias y capacidades, y
somos libres de actuar de acuerdo a ellas.
La cuestión importante es como hacer que las diferentes
aproximaciones de individuos y grupos que comparten los mismos objetivos a
largo plazo, se integren de tal modo que se complementen unas a otras.
8. La acción directa
es cobarde.
Esta acusación es casi siempre hecha por aquellos que tienen
el privilegio de poder hablar y actuar en publico sin miedo a las represalias:
Eso es, aquellos que tienen el poder en esta sociedad, y aquellos que
obedientemente aceptan este poder.
¿Deben los oprimidos demostrar su coraje y responsabilidad
actuando contra sus opresores a plena luz del día, condenándose así a la
derrota?
En una sociedad cada vez mas sometida a la vigilancia
indiscriminada de las fuerzas de seguridad de los poderosos, ¿es sorprendente
que aquellos que disienten quieran protegerse mientras lo hacen?
9. La acción directa
solo la practican los estudiantes, privilegiados niños ricos,gente pobre, gente
con problemas psicologicos, etc.
Esta acusación se hace casi siempre sin referirse a hechos
concretos, como difamación.
De echo la acción directa a sido practicada en una multitud
de formas por una gran variedad de gente de todo tipo de trayectorias vitales.
La única excepción podrían ser las clases más ricas y
poderosas, que no tienen necesidad de practicar ningún tipo de acción ilegal o
controvertida, porque, como si fuera una coincidencia, los canales políticos
establecidos se ajustan perfectamente a sus necesidades.
10. La acción directa
es el trabajo de agentes provocadores.
Esta es otra especulación hecha desde la distancia, sin
evidencias concretas.
que desaprueban como si fuera una Alegar que la acción
directa es siempre el trabajo de agentes policiales encubiertos es debilitante:
Elimina la posibilidad de que los activistas puedan hacer esas cosas por si
mismos, sobreestimando la fuerza de la policía y su inteligencia, reforzando la
ilusión de que el estado es omnipotente.
Así mismo, desestima a priori el valor y la realidad de una
diversidad de tácticas. Cuando la gente se siente autorizada a hacer infundadas
afirmaciones sobre cada táctica acusandola de provocacion policial, esto
obstruye todas las posibilidades de dialogo constructivo sobre las tácticas
adecuadas.
11. La acción directa
es peligrosa y puede tener repercusiones negativas sobre otras personas.
La acción directa puede ser peligrosa en un clima político
represivo, y es importante que aquellas que la practiquen hagan un esfuerzo
para no poner en peligro a otras.
Esto no es necesariamente una objeción a ella, al contrario,
cuando se vuelve peligroso actuar fuera de los canales políticos directa corren
establecidos, es cuando se vuelve mas importante el hacerlo.
Las autoridades usaran las acciones como excusas para
aterrorizar a los inocentes, como siempre han hecho los dictadores, pero ese es
un crimen por el que tienen que responder los que ostentan el poder, no
aquellos que se les oponen.
Así mismo, aunque la gente que practica la acción directa
corre verdaderamente un riesgo, enfrente de una injusticia insufrible es mas
peligroso e irresponsable dejarla sin contestación.
12. La acción directa
nunca consigue nada.
Cada movimiento político efectivo a través de la historia,
desde la lucha por la jornada laboral de ocho horas hasta la lucha por el voto
de las mujeres, ha hecho uso de alguna forma de acción directa. Esta puede
complementar otras formas de actividad política en una gran variedad de vías.
Si nada mas, resalta la necesidad de reformas
institucionales, dando a aquellas que luchan por ellas mas bazas a jugar.
Pero también puede ir mas halla de este rol de apoyo,
sugiriendo la posibilidad de una organizacion de la vida humana completamente
diferente , en la que el poder se distribuya equitativamente y todo el mundo
tenga una voz de igual valor para hablar sobre todos los asuntos que le
afectan.
Escrito por Crimethinc
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