Visto y no visto. Los seis empleados del Ayuntamiento de Bollullos Par del Condado (Huelva) que debían retomar su empleo ayer, a los nueve meses de su expulsión improcedente, apenas pudieron recuperar sus puestos de trabajo. A las dos horas los volvieron a despedir. Alegando "acoso psicológico", se dirigieron al cuartel de la Guardia Civil a denunciar al alcalde de la localidad, el tránsfuga Francisco José Díaz Ojeda (ex de IU), que los había despedido -junto con otros 24 trabajadores- el pasado 20 de enero, seis meses después de llegar al Ayuntamiento tras una moción de censura de PP e IU contra el edil socialista Carlos Sánchez.
El Juzgado de lo Social número 2 de Huelva emitió en su día dos autos en los que obligaba al actual alcalde a readmitir a los despedidos alegando que sólo se prescindió de ellos por ser afines al PSOE. Hubo dos juicios distintos por la misma causa. Uno se celebró el 6 de mayo -para seis de los afectados- y otro el 19 de mayo, para el resto. En ambos juicios, las sentencias resultaron favorables a los trabajadores.
El Juzgado de lo Social número 2 de Huelva emitió en su día dos autos en los que obligaba al actual alcalde a readmitir a los despedidos alegando que sólo se prescindió de ellos por ser afines al PSOE. Hubo dos juicios distintos por la misma causa. Uno se celebró el 6 de mayo -para seis de los afectados- y otro el 19 de mayo, para el resto. En ambos juicios, las sentencias resultaron favorables a los trabajadores.
Cita a las 8.00
El pasado viernes, los seis empleados recibieron una carta en la que se les citaba a reincorporarse ayer a las 8.00. Se presentaron a esa hora en el Ayuntamiento, donde firmaron en el parte de llegada. "Pero hasta las 10.00 nadie nos comunicó nada", detalló Reyes Domínguez, una de las trabajadoras. "No sabíamos qué teníamos que hacer", añadió.
Otra de las trabajadoras, Esther Pérez, señaló que "la situación emocional, económica y psicológica" del colectivo es "insostenible" y que "los seis se han llevado una gran desilusión". "Algunos han tenido que ir al centro de salud por ataques de ansiedad y problemas de tensión", sostuvo Pérez.
Los cinco concejales de IU y los cuatro del PP que se unieron para arrebatar la alcaldía a Carlos Sánchez fueron considerados tránsfugas por un dictamen de la Comisión de Seguimiento del Pacto Antitransfuguismo en julio. Sánchez había ganado las elecciones por mayoría simple, con siete concejales.
El equipo de gobierno actual mantiene que el ex alcalde contrató a los trabajadores poco antes de abandonar el Consistorio para "bloquear la acción de Gobierno" e hipotecar las arcas municipales. Manuel Moreno, primer teniente de alcalde (PP), dijo ayer desconocer los motivos que se iban a aducir para expulsar de nuevo a los seis trabajadores. "Sabía que se iba a proceder al despido pero no sabía que se haría el mismo día en el que se incorporaban", declaró ayer el actual teniente de alcalde.
fuente: El Pais
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