Llamamiento a la solidaridad con los compañeros presos en
Bielorrusia
Ha pasado bastante tiempo desde el último llamamiento a la
solidaridad con los anarquistas bielorrusos detenidos. Hoy, tenemos que admitir
la necesidad urgente de una nueva campaña de solidaridad para ayudarles a salir
de prisión. Por ello, hacemos un llamamiento a organizar en "días de
acción" en solidaridad con los presos políticos bielorrusos los días 22 y
23 de septiembre (el día de las elecciones al parlamento es el 23).
Los activistas Ihar Alinevich, Mikalai Dziadok, Artsiom
Prakapenka, Aliaksander Frantskievich, Jauhen Vas´kovich que fueron detenidos
en otoño de 2010 e invierno del 2011 y sentenciados a penas que oscilan entre
los tres y los once años de prisión acusados de una serie de ataques a símbolos
del Capital y del Estado. Durante estos dos años que permanecen en prisión, sus
familiares y compañeros han dado lo mejor de sí para hacerles sentir cómodos
durante el tiempo de condena y también para conseguir su libertad. En octubre
de 2011 fueron reconocidos como presos políticos por organizaciones de Derechos
Humanos, lo que les dio mayores oportunidades para ser liberados lo antes
posible, puesto que en ese momento el presidente de Bielorrusia, Alexander
Lukashenko, se enfrentaba a la presión de la UE por las demandas para liberar a
todos los presos políticos y despenalizarlos. Desde agosto de 2011 ha indultado
a más de treinta, pero a ninguno de nuestros compañeros se les ha concedido la
libertad. Lukashenko dijo públicamente que liberaría sólo a aquellos que
escribiesen una petición de indulto, admitiendo su culpabilidad y pidiéndole
clemencia a él personalmente. Quedó establecido que el resto permanecerían en
prisión. Ahora hay quince presos políticos aún en Bielorrusia, entre los cuales
hay cinco compañeros y otro más que fue detenido por actos de solidaridad con
ellos. De hecho, a todos los presos anarquistas se les preguntó varias veces si
querían firmar la petición, cinco de ellos se negaron a hacerlo. Artisom
Prakapenka lo firmó bajo presión pero sigue en la cárcel. Todos los presos
están sufriendo distintos tipos de presión por parte de las administraciones de
las cárceles donde están, porque Lukashenko quiere ser el ganador de la
situación de tal manera que no parezca que ha sido la UE quien le está
obligando a liberar a los presos por miedo a más sanciones económicas y
políticas, pero, si bien su voluntad es liberarlos, hay que reiterar que es
sólo si ellos lo piden antes. Estamos totalmente en contra de que nuestros compañeros
sean utilizados como moneda de cambio por beneficios de la UE y condenamos la
presión que están sufriendo. Llamamos a todo el mundo a protestar contra estas
arbitrariedades y exigimos la liberación inmediata de los presos políticos de
Bielorrusia, incluidos los anarquistas.
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