Pagan a un
agricultor 328 euros por 38.000 kilos de naranja
CARLES SENSO Desgraciadamente, todo
indica que en los próximos días muchos agricultores se van a sentir
identificados con el protagonista de la siguiente historia y similares quejas
van a inundar los corrillos que se creen entre profesionales del campo. Vicente
Ros es un labrador jubilado de Alzira que trabaja en sus huertos de forma
aficionada. Mantiene sus plantaciones después de heredarlas de sus suegros con
el único objetivo de seguir con la tradición. Esta semana recibió el pago de su
cosecha de este año por parte de la cooperativa de Alzira, Alzicoop. Ha cobrado
328 euros por 38.342 kilos de naranjas, a menos de un céntimo el kilogramo de
la variedad clemenules, o lo que es lo mismo, a 26 pesetas la arroba. «Es
totalmente indignante que a los agricultores nos cueste dinero del bolsillo
después de estar todo el año trabajando. Menos mal que tenía una bonificación
porque sino hubiese tenido que pagarles yo a ellos por venderles las naranjas»,
confesó ayer a Levante-EMV, Vicente Ros. El hecho es que el agricultor recibió
una ayuda por parte de la cooperativa de 1.500 euros por trabajar en una
«estructura agraria», lo que evitó el saldo negativo y que hubiese de pagar por
el hecho de que le recogiesen la producción de 22 hanegadas en una partida de
Vilella. En la entidad que reúne a los agricultores alcireños hay alrededor de
setenta agricultores más que en la actual campaña han tenido que recibir la
bonificación para no contar con un saldo negativo. Otros labradores de Alzira
recibirán alrededor de 1,2 euros por arroba, sin que tampoco lleguen así a
cubrir los gastos de producción.
«Fue mi mujer a poner al día la libreta del banco y vio el ingreso. No se
creía que fuera de las naranjas. Yo estaba en el campo y rápidamente me fui a
la cooperativa para reclamar una explicación. Hablé con el director y me dijo
que esos son los precios que se están pagando este año, que no se está pagando
más. Es indignante», explicó el agricultor alcireño. El año pasado cobró más de
4.000 euros por 24.000 kilos de naranjas y en 2005, cuando aún trabajaba los
campos su suegro, llegó a percibir 36.000 euros por cantidad similar. Siete
años después ha cobrado menos de un 1% de lo que llegó a percibir.
Los principales sindicatos del sector agrario han recibido centenares de
quejas en las últimas semanas por los precios a los que se están pagando las
producciones. El presidente de AVA, Cristóbal Aguado, confesó que se están
pagando «menos de siete céntimos por un kilo de mandarina clemenules, cuando
producir ese mismo kilo le supone al agricultor un gasto previo de 24
céntimos».
«La situación no se puede aguantar. Dicho campo a mí me cuesta alrededor de
4.500 euros al año, sin contar, por supuesto, los jornales que hago. Vale la
pena coger la motosierra y talarlo todo. Si vendo la madera aún saco beneficio
y el año que viene no tengo gastos», manifestó ayer, indignado, Vicente Ros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario