Miguel
Celma Martín
El 15 de mayo de 1920 nace en Calanda (Teruel,
Aragón, España) el anarquista y anarcosindicalista Miguel Celma Martín. Desde
muy joven se introdujo en el movimiento libertario. En febrero de 1937 se
enroló en Pina de Ebro en la 55 Centuria de la Columna Durruti, después de
convencer Pilar Balduque, secretaria del jefe de la columna Ricard Sanz García,
que lo consideraba demasiado joven. A raíz de la militarización siguió en la
misma centuria, ahora bajo el nombre de 119 Brigada, y sirvió como sargento de
información. Asistió a una escuela de la 26 División (antigua Columna Durruti),
realizó varios informes y se vio como su pretensión de ser aviador fue
rechazada por su corta edad, pero acudió a la Escuela de Ingeniería Militar de
Sarrià. Fue, por la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), secretario del Consejo de Administración de
la Colectividad de Calanda hasta la destrucción del proceso colectivizadora por
las tropas antirrevolucionarias comunistas de Enrique Líster Forján.
Después regresó a la 119 Brigada y se
incorporó a la Escuela de Información en Artesa de Segre hasta que fue herido,
en la zona de Tremp durante la ofensiva fascista del Ebro, e internado en el
hospital de Farners de la Selva. En febrero de 1939 pasó a Francia, pero fue
devuelto desde el castillo de Le Boulou en la Península. De nuevo en Francia,
pasó por varios campos: Sant Cebrià - permaneció dos meses y con Ginés Martínez
y otros se encargó de su acondicionamiento y fue secretario del primer núcleo
con confederal -, Vernet, Setfonts y Bram. En noviembre de 1939 fue llevar a
trabajar en Orleans. Con la ocupación alemana, se instaló en La Avelanet e hizo
de leñador para Rivesaltes, Salmiech y Noalhac, hasta que fue detenido por la
gendarmería pronazi. En abril de 1943 fue llevado a una fábrica de cemento en
Sète, donde malvisqué. En mayo consiguió huir y se integró hasta el final de la
guerra en el maquis de Lozère en un grupo de guerrilleros judíos. Con la
Liberación se estableció en El Avelanet y militó en la CNT y la Federación Ibérica
de Juventudes Libertarias (FIJL) en el sector ortodoxo.
En 1952 fue delegado por el Ariège al Pleno de
Aymar, donde defendió la presencia del secretario de la Asociación
Internacional de los Trabajadores (AIT). En el Pleno de noviembre de 1957 fue
nombrado Secretario General y de Relaciones Exteriores de la FIJL. En 1958
asistió al Pleno de Vierzon. El 26 de noviembre de 1959 asistió con Roque
Santamaría Cortiguera, en representación del sector ortodoxo, en la primera
reunión de la Alianza Sindical, que se vio paralizada cuando éstos no aceptaron
la presencia de cal otra facción cenetista en las negociaciones. En los años
posteriores ocupó cargos orgánicos y delegaciones importantes. En 1960 fue
secretario de la Federación Local de Calanda de la CNT en el Exilio. Entre el
26 de agosto y el 3 de septiembre de 1960, durante el II Congreso
Intercontinental de Limoges, redactó la ponencia «Acción directa y
revolucionaria» sobre Defensa Interior (DI), con Germinal Esgleas Santiago y
Vicente Llansola Renau. En el Pleno de Toulouse de 1962 fue elegido delegado de
la CNT en la AIT y en el VI Congreso de 1963 fue nombrado secretario de
Propaganda y de Cultura del Secretariado Intercontinental (SI).
En 1965 fue nombrado secretario adjunto de
Coordinación del SI y de nuevo de Propaganda y de Cultura en 1967. Durante los
años sesenta realizó numerosas conferencias (Dijon, Marsella, Burdeos, etc.),
Hizo de periodista para la prensa libertaria utilizando varios seudónimos (J.
Alauda, B. Torre-Mazas, M. Lino, Cal-Andino, Lave LaNeta, Martín Pirineos,
etc.) y animó a los cursos de esperanto organizados por la Federación Local del
FIJL de Toulouse. En 1974 prologó el libro de Federica Montseny Crónicas de CNT
(1960-1961). El 27 de marzo de 1977 participó, en la plaza de toros de San
Sebastián de los Reyes de Madrid, en el primer mitin público y autorizado de la
CNT en el Interior desde la Guerra Civil. Fue delegado del SI en el V Congreso
de 1979. En noviembre de 1980 asistió a la Semana Cultural Confederal de
Valencia. Fue administrador de Despertar y Espoir, y en 1984 dirigió la revista
Cenit. Participó en los documentales El Frente. Durruti, connais paso (1977),
de Raymond Cazaux; Un autre futuro. Espagne Rouge et Noir (1988), de Richard
Prost, y en Vivir la utopía (1997), de Juan A. Gamero. En 1996 prologó el libro
de Miguel Grau Caldu Memorias completas (1913-1991). Encontramos artículos
suyos en Boletín Interno CIR, Cenit, CNT, Le Combat Syndicaliste, conciencias
Libres, Espoir, Ideas, La Protesta Obrera, Siembra, Tierra y Libertad, Titán,
Umbral, etc. Es autor de Informe de gestión del Secretariado al Congreso
Intercontinental de Federaciones Locales (1963, con otros), XXXI aniversario de
la Revolución española (1967, con otros), variantes sobre la anarquía (1979; existe
una segunda parte inédita), Anales del exilio libertario (Los hombres, las
ideas, los Hechos) (1985; único tomo publicado de cinco proyectados), El
comunismo como funciones sociales (1988; segunda parte inédita), El federalismo
y suspensión Alea. O ¿ir a qué? (1989), La collectivité de Calanda (1936-1938):
la révolution sociale dans un village aragonais. Le Témoignage de Miguel Celma
(1997), así como varios textos inéditos (Diccionario social, Nuevos
soliloquios, etc.). Miguel Celma Martín murió en julio de 2007 a Cépet
(Languedoc, Occitania) y, cumpliendo su última voluntad, su cuerpo fue
entregado a la ciencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario