Y es evidente que está amenazado. Aunque todavía están pendientes de alguna reunión, los trabajadores se muestran dispuestos a iniciar movilizaciones laborales. Es más, las mismas fuentes sindicales aseguraron que la plantilla tramitará ante el Tribunal de Arbitraje Laboral (TAL)la convocatoria de una huelga que comenzaría el próximo 10 de enero. En la actualidad, trabajan en este servicio 120 trabajadores fijos, más una nómina de contratados que oscila según el apogeo de la temporada turística.
A día de ayer, así estaba la situación. Eso sí, el panorama hasta el 10 de enero aún podría cambiar. Pero para eso, es decir, para que FCC reconsidere su postura y acepte pagar las nóminas de su plantilla, la mercantil quiere que haya un gesto por parte del Ayuntamiento. La compañía no sólo está molesta por las cantidades astronómicas que le adeuda el Consistorio, sino sobre todo porque éste último no ha cumplido un calendario para aminorar los números rojos. El Ayuntamiento lo tiene difícil. La limpieza viaria y la recogida de basuras y enseres son prestaciones caras: cuestan cerca de 15 millones de euros al año, más de un millón al mes. Ayer, el concejal del ramo, el socialista Conrado Hernández, señaló que no había recibido notificación oficial de la empresa sobre esta situación.
No es la primera vez que FCC asume esta posición ante los impagos que sufre con el Consistorio de Benidorm. En noviembre, anunció que no pagaría a las trabajadoras de la otra contrata municipal que está gestionando en la población, la de la limpieza de los edificios públicos, también por los impagos de las arcas municipales. Entonces, la medida de fuerza le salió bien: el Ayuntamiento le pagó a la concesionaria los servicios prestados y las limpiadoras cobraron y anularon la huelga que ya habían convocado. Falta saber si ahora también se podrá llegar a la misma solución. En cualquier caso, fuentes de la empresa señalaron que se está intentado perjudicar lo menos posible a la ciudad. De hecho, la huelga, si llega, llegará en el momento de menor ocupación turística del año. Esto es, en el "valle" del gráfico de pernoctaciones de la temporada.
Hernández, por su parte, advirtió de que llueve sobre mojado. Aseguró que el grueso de la deuda con FCC viene de los anteriores gobiernos del PP, que por su parte siempre ha discrepado de esa opinión y ha asegurado que los números rojos bajo su gestión se quedaron en 24 millones. El edil socialista también se mostró muy crítico con los populares por otra cuestión: les reprochó que hubieran tumbado en el pleno el crédito ICO que pretendía aprobar el ejecutivo local y que al haber permitido pagar a numerosos proveedores municipales "hubiese podido liberar dinero para saldar deuda con FCC".
El problema de la basura en Benidorm, según describió Hernández, es que el Ayuntamiento paga a la concesionaria de forma íntegra lo que se recauda por la tasa de las basuras, unos 9 millones de euros, pero que eso no es suficiente: hay que pagar también otros servicios de la misma contrata como la limpieza viaria o la recogida de enseres que provoca, según los cálculos del gobierno municipal, un desvío anual cercano a los 4 millones de euros. Hernández arguyó por fin que FCC no tiene problemas sólo en Benidorm. "Son muchas las ciudades que no le pagan y sólo Madrid le debe 134 millones de euros".
Se abre pues un nuevo conflicto en la tortuosa relación entre el Consistorio y las concesionarias por causa de los numerosos impagos. Ya sucedió lo mismo con la jardinería, el socorrismo o la ayuda domiciliaria.
fuente: http://www.diarioinformacion.com/benidorm/2011/12/29/fcc-alerta-ahora-pagar-plantilla-recogida-basura/1206452.html
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