Los trabajadores de Navantia protagonizan una jornada de
protestas
Los trabajadores de los astilleros de Navantia en la Bahía
de Cádiz han emprendido esta mañana una nueva movilización para reclamar carga
de trabajo, con unas marchas que confluirán en la entrada de la capital
gaditana y concluirán frente a la Subdelegación del Gobierno en la provincia.
Los primeros en iniciar la marcha han sido los más de mil
trabajadores de la factoría de San Fernando, que poco después de las ocho de la
mañana han emprendido una marcha en la que recorrerán los ocho kilómetros que
les separa de la capital gaditana.
Las protestas de los trabajadores de las tres factorías de
Navantia de la Bahía de Cádiz mantiene cortados desde poco después del mediodía
todos los accesos a la capital gaditana, ha informado la Subdelegación del
Gobierno. Las marchas han obligado al corte de las vías de acceso desde San
Fernando por la CA-33 y desde Puerto Real por la N-443, donde se registran
atascos de hasta cuatro kilómetros.
Los 600 trabajadores de la plantilla de Puerto Real han
comenzado su marcha sobre las 11.30, para dirigirse a la capital gaditana
atravesando el puente de Carranza.
En torno al mediodía, se unieron a estas dos plantillas a la
entrada de la ciudad los 150 trabajadores del astillero de Navantia en Cádiz.
Todos ellos marchan hasta la Subdelegación del Gobierno de
Cádiz donde el ex Defensor del Pueblo Andaluz José Chamizo leerá un manifiesto.
El presidente del comité de empresa de la factoría de
Navantia en Puerto Real, Ramón Linares, ha explicado que las plantillas de
estos astilleros cumplen este mes dos años de movilizaciones en demanda de
carga de trabajo "sin ningún resultado".
Tras destacar que la actividad en estos centros "es la
mejor manera de crear empleo en la Bahía de Cádiz", la provincia española
con más tasa de desempleo, Ramón Linares ha pedido al Gobierno que haga
"un esfuerzo" porque "es el momento de que den el do de
pecho".
En ese sentido, ha explicado que ahora tiene "una
oportunidad" haciendo que el contrato de construcción de cuatro gaseros
para el consorcio español formado por Repsol y Gas Natural, una operación que
daría más 1.500 empleos, recaiga en los astilleros de Navantia de la Bahía de
Cádiz.
"No entenderíamos que siendo empresas españolas se
contrate a empresas de Corea para su construcción", apunta Ramón Linares,
que advierte de que si el país asiático es "el número uno por lo
barato" no se debe a que los costes de la mano de obra sean inferiores
"sino a que la gestión y la compra de material cuesta menos".
Los trabajadores de los astilleros de la Bahía de Cádiz
temen que estos contratos se vayan a Corea y por eso una de las razones de esta
movilización, a la que se prevé que se unan los parados de las industrias
auxiliares y otros colectivos de desempleados, es decirle al Gobierno que en
una situación de crisis como la actual no puede imperar "la ley del
mercado", sino la decisión política de reactivar el empleo en la Bahía de
Cádiz.
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