Con la fachada manchada por el impacto de tomates, huevos, frutas y basura en general amaneció ayer la sede del PSOE conileño. El vandalismo se cebó con el local del partido la madrugada del lunes al martes. La porquería lanzada con saña salpicó incluso a un comercio contiguo. El secretario general del PSOE municipal, Nicolás Fernández, y la secretaria de Organización de la formación política, María del Carmen Sánchez, han denunciado los hechos ante la Policía Local. Los agentes se personaron temprano en el lugar para tomar fotografías y levantar acta de lo sucedido. Luego dieron parte en el cuartel de la Guardia Civil.
Es la primera vez que sucede algo así en este nuevo local de la calle Lepanto. Ocurre cuatro días después de un pleno municipal en el que se rechazó la propuesta de presupuesto del equipo de gobierno de Izquierda Unida gracias a los votos en contra de socialistas (8), populares (2) y andalucistas (1). Y después de que el propio alcalde, Antonio Roldán, llamase "traidores" a los miembros del PSOE, amenazase con votar en contra de los presupuestos de sus socios de gobierno socialistas en la Diputación, de la que es vicepresidente, y les acusase de poner en riesgo el pacto provincial. Y que desde el PP se tachase de "desvergüenza" la "lucha por el poder" de las dos formaciones políticas, a las que, pese a haber votado también en contra, atribuye en exclusiva que no saliesen adelante las previsiones económicas de IU. ¿Fue un episodio aislado de gamberrismo o la reacción de un grupo de radicales a un conflicto político local?
"No quiero ni pensar que tenga que ver con la disputa política de la semana pasada. Quiero pensar que se trata de un acto vandálico, de puro gamberrismo, que es una mera coincidencia, que la confrontación política va por un lado y que esto va por otro", declaró a este periódico el secretario local del PSOE. "Yo todavía no salgo de mi asombro", apuntó la secretaria de Organización. "La noche anterior fuimos a recoger una pancarta y ya vimos que habían tirado un par de huevos, pero no le dimos importancia. Al día siguiente nos desayunamos con el resto. Es la primera vez que pasa. Sinceramente, no sé a quién ni a qué atribuirlo. Pero da mucho que pensar. No sé si tendrá que ver con el asunto de los presupuestos", añadió María del Carmen Sánchez.
Nicolás Fernández, sin embargo, insistió en que las diferencias políticas no tienen nada que ver con el acto vandálico y que, por tanto, no teme que se vuelva repetir. Ni siquiera si se demora la aprobación del presupuesto municipal. "No sé cuándo se aprobará. Pregúntenle al equipo de gobierno. IU quería cometer una ilegalidad sacando adelante una propuesta económica que vulnera la Ley de Haciendas Locales y sobre la que pesaba un informe negativo de la Intervención municipal. Por eso nos hemos opuesto. Los socialistas, en Conil, somos oposición. Aquí no tenemos ningún pacto como en Diputación. De hecho, lo poco que hemos negociado y acordado, se lo han pasado por el forro. Sacar adelante el presupuesto sólo está en su mano", dijo.
Es la primera vez que sucede algo así en este nuevo local de la calle Lepanto. Ocurre cuatro días después de un pleno municipal en el que se rechazó la propuesta de presupuesto del equipo de gobierno de Izquierda Unida gracias a los votos en contra de socialistas (8), populares (2) y andalucistas (1). Y después de que el propio alcalde, Antonio Roldán, llamase "traidores" a los miembros del PSOE, amenazase con votar en contra de los presupuestos de sus socios de gobierno socialistas en la Diputación, de la que es vicepresidente, y les acusase de poner en riesgo el pacto provincial. Y que desde el PP se tachase de "desvergüenza" la "lucha por el poder" de las dos formaciones políticas, a las que, pese a haber votado también en contra, atribuye en exclusiva que no saliesen adelante las previsiones económicas de IU. ¿Fue un episodio aislado de gamberrismo o la reacción de un grupo de radicales a un conflicto político local?
"No quiero ni pensar que tenga que ver con la disputa política de la semana pasada. Quiero pensar que se trata de un acto vandálico, de puro gamberrismo, que es una mera coincidencia, que la confrontación política va por un lado y que esto va por otro", declaró a este periódico el secretario local del PSOE. "Yo todavía no salgo de mi asombro", apuntó la secretaria de Organización. "La noche anterior fuimos a recoger una pancarta y ya vimos que habían tirado un par de huevos, pero no le dimos importancia. Al día siguiente nos desayunamos con el resto. Es la primera vez que pasa. Sinceramente, no sé a quién ni a qué atribuirlo. Pero da mucho que pensar. No sé si tendrá que ver con el asunto de los presupuestos", añadió María del Carmen Sánchez.
Nicolás Fernández, sin embargo, insistió en que las diferencias políticas no tienen nada que ver con el acto vandálico y que, por tanto, no teme que se vuelva repetir. Ni siquiera si se demora la aprobación del presupuesto municipal. "No sé cuándo se aprobará. Pregúntenle al equipo de gobierno. IU quería cometer una ilegalidad sacando adelante una propuesta económica que vulnera la Ley de Haciendas Locales y sobre la que pesaba un informe negativo de la Intervención municipal. Por eso nos hemos opuesto. Los socialistas, en Conil, somos oposición. Aquí no tenemos ningún pacto como en Diputación. De hecho, lo poco que hemos negociado y acordado, se lo han pasado por el forro. Sacar adelante el presupuesto sólo está en su mano", dijo.
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