Poco a poco y en torno a las 09.30 horas fueron llegando los empleados que lo primero que hicieron fue clavar estacas con forma de cruz anunciando lo que parece que es la crónica de una muerte anunciada en las que se podían leer alusiones de las familias que se quedan en la calle o atacando directamente a los propietarios de la empresa chiclanera.
Una vez que el grupo se hizo más compacto decidieron cortar al tráfico durante al menos un cuarto de hora la N-340 a la altura del polígono de Pelagatos, provocando las lógicas retenciones. Algunos de los conductores trataban de pasar la barrera sin éxito, otros directamente aguardaron a que pasase el tiempo para seguir su camino y los más numerosos se daban la vuelta y regresaban por donde habían venido.
Posteriormente, la protesta se traslado al interior del recinto de la fábrica, justo enfrente al edificio de las oficinas Polanco, para reclamar la presencia de algún representante de la empresa para exigirles explicaciones. Fueron intentos en vanos. Fue entonces cuando en torno a las 11.15 horas los trabajadores decidieron ir a pie hasta Chiclana donde a la una de la tarde había prevista una reunión con el alcalde, Erneste Marín.
Agustín González, representante de Comisiones Obreras, afirmaba que la manifestación lo que perseguía era "dar un tirón de oreja a los únicos culpables de la situación en la que nos encontramos por ese inminente riesgo de cierre", ya que consideran que "han tirado muy pronto la toalla, ya que nosotros estamos convencidos de que Polanco tiene futuro".
González mostró su malestar con los propietarios de la empresa por la ley del silencio que están manteniendo en torno a esta problemática. "Es algo que nos preocupa, sobre todo porque lo que pretendemos es que nos digan algo. Nuestra intención es que el centro siga abierto y salvar el mayor número posible de puestos de trabajo".
La plantilla tiene previsto reunirse este martes con el grupo municipal socialista y el miércoles con el delegado provincial de Empleo, Antonio Bouza.
Marín pretende reunirse con Recio
Por otro lado, el alcalde de Chiclana, Ernesto Marín, solicitará al consejero de Empleo de la Junta de Andalucía, Manuel Recio, una reunión urgente, con el objeto de conocer qué tiene previsto hacer el gobierno andaluz para solventar la situación “tan grave” que atraviesa la empresa Maderas Polanco. El primer edil se ha comprometido a realizar esta gestión a petición de los representantes de los trabajadores de la factoría.
Ernesto Marín también ha asegurado que el Grupo del Partido Popular, a través de su diputada andaluza Teresa Ruiz Sillero, presentará una pregunta en este mismo sentido en el Parlamento de Andalucía, la vez que ha mostrado su entera disponibilidad para recabar los apoyos necesarios para la permanencia de los máximos puestos de trabajo posible.
“Desde este preciso momento -ha afirmado el alcalde- me comprometo con vosotros para hacer todas aquellas gestiones políticas que creáis oportunas y que llevan a solucionar la situación tremendamente difícil por la que atraviesa Polanco”.
Por otra parte, Ernesto Marín ha informado a los representantes de los trabajadores sobre las diferentes gestiones que ha realizado tras la reunión que mantuvieron el pasado septiembre, y en la que también estuvieron presentes el primer teniente de alcalde, Nicolás Aragón, y el delegado de Fomento, José Manuel Lechuga.
Por último, el alcalde ha reiterado a los trabajadores su compromiso de colaboración en cuantas acciones se puedan llevar a cabo, siempre teniendo en cuenta el escaso margen de maniobra que tiene la administración local”.
fuente: cadizinformacion
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