Explotaba a los trabajadores y ahora pagará por ello. M. E., de 26 años, un empresario de nacionalidad marroquí afincado en Cartaya (Huelva), ha sido condenado por el Juzgado de lo Social número 1 de Huelva a abonar 16.000 euros, en "concepto de salarios y otros aspectos retributivos", a cada uno de los empleados, compatriotas suyos, a los que trataba como "esclavos" en una empresa textil de su propiedad.
Un quinto trabajador, que denunció más tarde que sus compañeros los hechos, espera la sentencia después de que se celebrara ayer su juicio por la vía laboral. El abogado de los demandantes, Fernando Osuna, recordó ayer que el empresario "sólo abonó 200 euros a repartir entre cinco empleados". El patrón cobró 7.500 euros por cada uno de ellos para sufragar los gastos de residencia y permisos de trabajo. Este proceso es independiente al que se sigue por vía penal en el Juzgado de Ayamonte, que se celebrará en 2010.
Un quinto trabajador, que denunció más tarde que sus compañeros los hechos, espera la sentencia después de que se celebrara ayer su juicio por la vía laboral. El abogado de los demandantes, Fernando Osuna, recordó ayer que el empresario "sólo abonó 200 euros a repartir entre cinco empleados". El patrón cobró 7.500 euros por cada uno de ellos para sufragar los gastos de residencia y permisos de trabajo. Este proceso es independiente al que se sigue por vía penal en el Juzgado de Ayamonte, que se celebrará en 2010.
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