Se han quedado solos. Así lo admitía ayer uno de los empleados civiles del hospital militar de San Carlos. Hasta ahora, el lastre de no regirse por el estatuto de la sanidad pública sino por el convenio de la administración era una carga que compartían con los trabajadores de las instalaciones de Ceuta. Un lastre por diversos motivos, aunque principalmente por el hecho de que el salario percibido según el estatuto de sanidad es mucho mayor que el convenio general de la administración. Y porque en el segundo no se reconoce la categoría profesional de personal sanitario, y tampoco se tienen en cuenta una serie de complementos. El agravio es por tanto no solo económico sino de pleno reconocimiento. De esta manera, los profesionales médicos de carácter civil que actualmente trabajan en el hospital de San Carlos no son considerados médicos especialistas, sino simplemente tienen la categoría de titulado superior de actividades específicas.
Y hasta este momento, la carga de esta desventaja al menos era compartida con los empleados civiles de Ceuta. Pero no será así a partir de ahora, tras la publicación del cambio de situación en este centro en los boletines oficiales pertinentes. De esta manera, las instalaciones de Ceuta se suman a las de Madrid y Zaragoza en cuanto a la aplicación de este estatuto. De la situación de los trabajadores civiles del hospital de San Fernando, sin embargo, no se dice nada. Y esto es lo que más les inquieta. El absoluto silencio al respecto. Hace ya más de 18 meses que este estatuto entró en vigor y comenzó a aplicarse a otros centros hospitalarios pero nunca se ha recibido ninguna información al respecto de los empleados de las dependencias hospitalarias isleñas.
Por esta razón, parte de los afectados por esta situación se volvían a concentrar ayer en las puertas del hospital. Como cada miércoles, el paro es de cinco minutos en el que solicitan mediante pancartas la estatutarización de su situación, pero también, insisten, que al menos se les ofrezca un poco de información acerca del proceso. Ayer, al término de la protesta y conociendo las novedades producidas en las dependencias de Ceuta, estos afectados decidieron reunirse en asamblea para analizar la situación actual y decidir la continuidad de las protestas. Tras un encuentro breve, quedó claro, las protestas continuarían, en aras a conseguir que se les escuche, que se les dé una explicación, pero sobre todo, que su situación se equipare a la del resto de profesionales civiles que trabajan en instalaciones militares. Un ejemplo lo apuntaba uno de los afectados en referencia al sueldo, que por ejemplo en el caso de los médicos representa la mitad de lo que cobraría mensualmente si su situación fuera la que, por ley, debiera aplicarse.
En esta situación se encuentran en la actualidad nueve profesionales, que son los que más diferencias económicas aprecian, pero también 110 enfermeros, 96 auxiliares de clínica y 28 celadores. Lo que hay que matizar, eso sí, que la adhesión de cada trabajador a este estatuto es voluntaria, es decir, que una vez entre en vigor en las instalaciones de San Fernando es cada uno de los afectados el que puede decidir si le interesa adscribirse o no.
Y hasta este momento, la carga de esta desventaja al menos era compartida con los empleados civiles de Ceuta. Pero no será así a partir de ahora, tras la publicación del cambio de situación en este centro en los boletines oficiales pertinentes. De esta manera, las instalaciones de Ceuta se suman a las de Madrid y Zaragoza en cuanto a la aplicación de este estatuto. De la situación de los trabajadores civiles del hospital de San Fernando, sin embargo, no se dice nada. Y esto es lo que más les inquieta. El absoluto silencio al respecto. Hace ya más de 18 meses que este estatuto entró en vigor y comenzó a aplicarse a otros centros hospitalarios pero nunca se ha recibido ninguna información al respecto de los empleados de las dependencias hospitalarias isleñas.
Por esta razón, parte de los afectados por esta situación se volvían a concentrar ayer en las puertas del hospital. Como cada miércoles, el paro es de cinco minutos en el que solicitan mediante pancartas la estatutarización de su situación, pero también, insisten, que al menos se les ofrezca un poco de información acerca del proceso. Ayer, al término de la protesta y conociendo las novedades producidas en las dependencias de Ceuta, estos afectados decidieron reunirse en asamblea para analizar la situación actual y decidir la continuidad de las protestas. Tras un encuentro breve, quedó claro, las protestas continuarían, en aras a conseguir que se les escuche, que se les dé una explicación, pero sobre todo, que su situación se equipare a la del resto de profesionales civiles que trabajan en instalaciones militares. Un ejemplo lo apuntaba uno de los afectados en referencia al sueldo, que por ejemplo en el caso de los médicos representa la mitad de lo que cobraría mensualmente si su situación fuera la que, por ley, debiera aplicarse.
En esta situación se encuentran en la actualidad nueve profesionales, que son los que más diferencias económicas aprecian, pero también 110 enfermeros, 96 auxiliares de clínica y 28 celadores. Lo que hay que matizar, eso sí, que la adhesión de cada trabajador a este estatuto es voluntaria, es decir, que una vez entre en vigor en las instalaciones de San Fernando es cada uno de los afectados el que puede decidir si le interesa adscribirse o no.
fuente: diariodecadiz
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