Hace ya un mes que el enorme dique de Puerto Real permanece vacío. Tampoco ofrece una mejor imagen el de San Fernando y Cádiz sobrevive gracias a la reparación de cruceros. Ante este panorama los trabajadores han decidido subir el nivel de las protestas y ayer cortaron el puente con barricadas de neumáticos en llamas para exigir un compromiso del Gobierno con la segunda fase de los buques de acción marítima, los llamados BAM, y que se aprovechen las oportunidades en el mercado civil.Las movilizaciones coincidieron con la comparecencia del ministro de Defensa, Pedro Morenés, ante el Senado donde no pudo eludir la pregunta sobre este encargo como hizo en su última visita a Rota: ¿se firmará la autorización y para cuántas unidades? Y la respuesta fue contundente: se aplazará hasta después de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estados porque adelantarla «sería una irresponsabilidad».
De esta manera daba por contestada la pregunta del senador del PSOE por Cádiz, Enrique Abad, que le interrogó sobre las fechas de la firma. Abad planteó a Morenés la necesidad de conseguir carga de trabajo para los astilleros de la Bahía, que ya está a punto de finalizar la primera base de los BAM y también ha terminado los encargos de Venezuela.
Este periódico ya adelantó que en las últimas semanas se han producido reuniones entre dirigentes del PP andaluz y miembros del Gobierno de Rajoy para desatascar esta iniciativa y en ellas se ha dejado patente la dificultad para hacer frente a la segunda fase completa, con lo que ya se baraja como opción la autorización de dos o tres buques, entre los que se encontrarían algún oceanográfico y de logística, los de menor coste.
Pero la sesión de control no abordó tal asunto. El senador socialista señaló que «el sector naval es un motor de la economía gaditana», a lo que el ministro recalcó que tanto esta industria como Navantia son «esenciales», pero dejó claro que su departamento tiene que mirar «los escenarios presupuestarios y los escenarios operativos» para poder abordar programas de este tipo. «Mientras no conozcamos el techo presupuestario de 2012, adelantar una decisión sería una irresponsabilidad que el Gobierno no va a cometer» y con ello dio por zanjada la respuesta.
Dura coyuntura
Antes de conocer las declaraciones del ministro, los trabajadores celebraron una asamblea en la factoría de Puerto Real para analizar un informe publicado en la revista especializada Ingeniería Naval, que edita la Asociación de Ingenieros Navales y Oceánicos de España. Este texto alerta de que la situación es crítica y pronto habrá más astilleros que barcos por construir. Cuando llegue ese momento solo sobrevivirán los más fuertes y por eso los trabajadores reclaman que la búsqueda de carga de trabajo vaya en la dirección adecuada.
El presidente del comité de empresa, Ramón Linares, señaló que «con esta protesta queremos lanzar un mensaje directo a los políticos, sobre todo a los del PP, para que den instrucciones a la dirección de Navantia para que nos introduzca en el mercado civil ya». Según dijo, «cada vez hay menos demanda y por eso se construyen menos barcos, y esa es la razón de que apremiemos a los políticos para que nos introduzcan en un mercado, el civil, de gaseros, ferris y ro-ro, en el que somos competitivos y hay que hacerlo antes de que los monstruos de la construcción naval como son China, Corea o Brasil, se interesen también y copen ese mercado».
La razón para reclamar la inmersión de los astilleros de Navantia de la Bahía en el mercado civil la ha encontrado Linares en que la construcción militar no da trabajo suficiente para las tres factorías gaditanas. «No se puede perder el tren del mercado civil, no podemos vivir los tres astilleros solo con la construcción militar», apostilló. Los astilleros gaditanos pueden destinar hasta un 20% de la cuota de facturación, pero «no se llega ni a la mitad», recalcó Linares.
También dijo que «los BAM, tres o cinco, no dan trabajo a la industria auxiliar», por eso mismo es importante buscar nuevas vías de negocio. Ya Navantia firmó un acuerdo con Iberdrola para fabricar plataformas flotantes para parques eólicos marinos, pero esta línea sigue aún en la fase de prototipos. La compañía ya ha iniciado los trabajos previos, pero aún es demasiado pronto para que tengan algún tipo de repercusión en la carga de trabajo. De momento han presentado el proyecto a un programa de ayudas gestionado por la Consejería de Innovación a cargo de los fondos FEDER para desarrollar iniciativas de I+D+i, pero las elecciones andaluzas podrían retrasar más su asignación.
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