Contra toda forma de Estado,
tanto aconfesional como laico
La historia de las religiones ha
estado siempre vinculada a la sumisión del ser humano a la idea de un ente
superior. En las primeras sociedades humanas, apoyándose en la ignorancia de
estas primeras comunidades se erigieron unas figuras que estimularon sus miedos
hacia lo desconocido, y que en base a un supuesto conocimiento dirigieron la
vida del resto de la población. Por tanto podemos establecer una clara y
directa vinculación entre el principio de autoridad (esto es, la falsa creencia
que dice ser necesaria la existencia de jerarquías y figuras que dirijan al
resto de las personas en base a su superioridad física o intelectual) y la
religión. Este es el origen de la alienación política-religiosa que junto a la
alienación cultural y económica resultan las principales ramas del actual
régimen de explotación. -- En el devenir histórico de las sociedades humanas
las clases sociales que ostentaban el poder siempre han utilizado la Religión
para fortalecer su imagen aportando así grandes cotas de poder político y
económico a las distintas religiones existentes.
Podemos citar algunos ejemplos,
como el caso del Imperio Romano donde se rendía culto religioso al Emperador,
pasando por las monarquías europeas autoritarias que vincularon el poder real a
la providencia divina o las distintas guerras de religión europeas de los
siglos XVI y XVII que ocultaban intereses económicos de los Estados y de la
naciente burguesía mercantil.
La Iglesia Católica en particular
representa una de las religiones más despiadadas de la historia. No
desarrollaremos todos los hechos históricos que le otorgan esta negra
reputación, debido a la falta de espacio y por ser ya de sobra conocidos (la
Inquisición y su despiadada represión, la persecución de todo conocimiento
científico que desmintiera las supersticiones de la Biblia…)
El caso de España es un caso muy
especial puesto que la Iglesia Católica siempre ha manejado altos niveles de
poder político e influencia en la sociedad española. Mediante la Compañía de
Jesús (los Jesuitas) la Iglesia Católica se perpetró de grandes centros de
adoctrinamiento donde envenenar a la infancia y así asegurarse de que las
futuras generaciones aceptarían sin rechistar el dogma católico.
Hoy aún los centros educativos
religiosos vinculados a la Iglesia Católica reprimen y manipulan a decenas de
miles de jóvenes estudiantes. Hemos de hacer mención al obstáculo que el
Movimiento Obrero encontró siempre en la Iglesia a la hora de propagar entre la
Clase Trabajadora las nuevas ideas del Socialismo, en pro de la justicia
social. La Iglesia, siempre de la mano de las clases dirigentes, resultó ser
una fuente de propaganda para la burguesía, que mediante el adoctrinamiento
moral se servía de la falta de formación de las clases bajas para inculcarles
sus mentiras. Esta alianza entre burguesía e Iglesia, quedó patente en muchas
ocasiones en España, tal y como demostró el asesinato del pedagogo anarquista
Ferrer i Guardia donde la Iglesia presionó a las autoridades para que se
sentenciase a muerte al maestro o el descarado apoyo al régimen fascista de
General Franco.
Hoy en día, la Iglesia Católica
representa un colosal imperio económico, que sigue ejerciendo una nefasta
influencia sobre millones de personas en todo el mundo. Muchos escándalos
rodean actualmente a la Iglesia Católica, tales como los abusos sexuales contra
niños por parte de miembros eclesiásticos, episodios de corrupción vinculados
al Banco Vaticano…
En la actualidad, la Iglesia
Católica desempeña en España un importante papel en la vida política y ejerce
una fuerte influencia en las decisiones que desde el poder político se toman.
Por no decir las privilegios fiscales con lo que cuenta esta Institución.
Ahora bien, nuestra lucha contra
la alienación religiosa, ha de ir directamente vinculada al rechazo de toda
autoridad que pretenda imponerse en nuestras vidas. Por eso rechazamos de pleno
la idea de un “Estado laico”. El Estado mediante el uso de la violencia directa
o indirecta, protege los intereses de la Clase Dirigente y mantiene sus
privilegios. Así se dota de todo un aparato judicial y burocrático destinado al
control de los individuos, legisla siempre a favor de mantener el orden
establecido y otorga más beneficios económicos a la Clase Empresaria mediante
la explotación de la Clase Trabajadora.
Hemos demostrado anteriormente
como históricamente el Estado se ha apoyado en la Religión para legitimarse
pero eso no hace imposible la existencia de un Estado “laico” igual de tiránico
que un Estado teocrático o un Estado aconfesional. La esencia del Estado será
siempre el control de la población mediante diversos métodos, sutiles como la
educación y/o si se diera la necesidad, mediante la represión y las guerras.
¿No ha habido ya Estados donde el poder religioso ha sido muy limitado? ¿Acaso
no siguen siendo lugares con desigualdad social y explotación donde hay todavía
prejuicios y tabúes mediante los cuales condicionar las vidas de las personas?
La lucha por una sociedad atea,
libre de todo dogma religioso que anteponga a un Ser Supremo al ser humano ha
de ir directamente vinculada a la superación del actual sistema capitalista,
donde las personas quedan relegadas a mercancía a la que se puede explotar, y
la desigualdad social y la explotación del ser humano por el ser humano rigen
nuestras vidas. Solo mediante la sustitución de ideas como la caridad cristiana
(destinada a parchear las desigualdades sociales), por la solidaridad y el
apoyo mutuo entre las personas se asegurará una auténtica sociedad de hombres y
mujeres libres. Forjar una nueva sociedad, sin líderes ni autoridad, donde las
decisiones emanen de la base y se fomenten el conocimiento y las artes,
garantizará el fin de todo tipo de dominación, ya sea religiosa, política o
económica.
¡HAREMOS ESTALLAR SUS RELIGIONES!
¡CONTRA TODOS LOS ESTADOS!
¡CONTRA TODA AUTORIDAD!
¡POR LA ANARQUÍA!
GRUPO BANDERA NEGRA, ADHERIDO A
LA FEDERACIÓN IBÉRICA DE JUVENTUDES
ANARQUISTAS (F.I.J.A)
No hay comentarios:
Publicar un comentario