¿Regresaremos al Futuro?
Manuel Lucas Matheu
ESTAMOS descubriendo en este país, que la quimera del túnel
del tiempo, puede llegar a ser una realidad. Es como la película "Atrapado
en el tiempo", en la que el protagonista, cada mañana que despierta, está de
nuevo en el mismo día. Bueno hay una diferencia. Nosotros despertamos, y cada
vez estamos incluso más atrás. Derechos que se habían adquirido, se han vuelto
a perder.
Es como una
pesadilla, que no cesa, porque cada mañana nos damos cuenta que hemos retrocedido
un poco más en el tiempo, y de cómo nos acercamos velozmente a épocas pasadas.
Recuerdo, a finales de los 70, cuando yo era médico en Beas de Segura, que un
matrimonio ligado al Opus, vino a mi consulta a pedirme que les firmara un
manifiesto contra el derecho a abortar de las mujeres. Me negué, y les explique
que yo estaba a favor de ese derecho. Me pusieron de chupa de dómine por el
pueblo. Pasado un año, vinieron de nuevo a mi consulta, y ¡sorpresa!. Dándole
mil vueltas antes de hacerlo, acabaron pidiéndome una dirección de Londres,
para que su hija pudiera viajar, a solucionar un terrible problema, que
mancharía el honor de la familia, y trastocaría su buena imagen. Es decir para
abortar.
El tan cacareado
"derecho a la vida", ya no tenía importancia, frente a la
"conveniencia social". Un descarnado ejemplo de la doble moral, tan
frecuente en este tipo de posturas. No les voy a contar que hice. Pero nunca
jamás olvidaré esto. Lo que sí olvidé hace muchos años, fueron las direcciones
de las clínicas londinenses. Jamás pensé que algún día volverían a ser
necesarias. El problema es que ahora, como pasaba entonces, solo algunas
mujeres, como la hija de aquel matrimonio, podrán permitirse ir a Londres. Pero
otras tendrán que poner en riesgo su salud y sus vidas, porque unas personas
han decidido imponer sus creencias a todas las demás. Caminar hacia atrás,
viendo caer todo lo conseguido, es profundamente triste. Tan triste como los
personajes que lo están haciendo posible.
El señor Galllardón,
con su fingidas "poses" de progresista de derechas, logró engañar a
muchas personas. Ahora toda esa pose, se ha desdibujado, y queda al descubierto
el verdadero Gallardón. Un hombre sumamente retrógrado, que trata a las mujeres
como seres irresponsables e irreflexivos. Un hombre que ha decidido, decidir
por muchas mujeres, porque se siente en posesión de la verdad absoluta. Este
gobierno, traza un firme camino hacia un retroceso de vértigo hacia el pasado,
en el túnel del tiempo. ¿Cuándo regresaremos al futuro?
PD: la foto no pertenece al articulo
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