La Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el Instituto Nacional de Estadísticas dibujó ayer el peor de los escenarios laborales. España supera los cinco millones de parados y Cádiz se coloca a la cabeza de esta lista negra con una tasa de desempleo del 35% en el último trimestre de 2011. Este índice es cuatro puntos superior a la media andaluza y se encuentra hasta 13 por encima de la nacional. El año pasado, sin duda el peor que ha vivido el mercado de trabajo gaditano, cerró con 201.800 parados, una cifra que no se recordaba desde la crisis de mediados de los noventa.
Y parece que no hay visos de recuperación. Las empresas siguen acumulando cierres -el último y más sonado, el de la multinacional Visteon que ya ha pactado las indemnizaciones con la plantilla y deja otros 400 parados más-.
En este último año se han destruido 17.700 empleos, a razón de 48 diarios entre finalización de contratos, despidos y puestos amortizados tras una jubilación o una baja permanente. En los últimos doce meses el paro ha crecido en 24.100 personas (casi un 12%), con una mayor incidencia entre los hombres. En torno a 15.900 trabajadores perdieron su empleo, frente a las 8.200 trabajadoras. Y los que más han sufrido esta sangría son los que tenían la tranquilidad de un contrato indefinido (se han perdido 12.900 trabajos fijos en 2011(.
La gran mayoría de ellos provienen de la construcción, que ha perdido una cuarta parte de sus ocupados. El sector empleaba a finales de 2010 a 38.400 personas y apenas hoy logra dar trabajo a 25.800, tal como recoge el INE. Este descenso es atribuible al recorte en la obra pública que es la única que mantenía esta actividad a flote y a la finalización de iniciativas como el Plan E, de carácter estatal o el Proteja, que planteó la Junta. Por el contrario, la industria logra contener la destrucción de puestos con un 4,7% menos de ocupados. El sector servicios también consigue aguantar la embestida y mantiene casi intacto -con un leve descenso del 2,4%- a su tremendo volumen de trabajadores, que alcanza los 292.700. A pesar de que ha logrado salvar los muebles durante este año aciago, es uno de los que arrastra mayor precariedad y temporalidad.
Y como sorpresa en medio de esta amalgama de datos fúnebres destaca la agricultura que logra levantar cabeza con un dato positivo, tal vez el único de la encuesta nacional. El campo cerró 2011 empleado a 600 gaditanos más hasta rozar los 13.000.
73.900 hogares en paro total
Uno de los aspectos más duros de esa sangría laboral es el tremendo número de hogares que tiene a todos sus miembros en paro. En la provincia suman 73.900, son 17.500 más que hace un año (un 23,6%) más y representan ya el 17,4% de las familias gaditanas.
El balance de los responsables públicos ante la difícil situación es confiar en nuevos ajustes y asumir los números de la manera que mejor interesa. Los sindicatos hablan de «fractura social» y fracaso de las medidas planteadas, los empresarios exigen que se libere la financiación para crear puestos de trabajo y hasta el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, llega a calificar las cifras como una «tragedia». Ayer reconocía que se trata «de uno de los sufrimientos diarios con los que se tiene que enfrentar».
Otro de los colectivos que determina la evolución del empleo son los que se inscriben por primera vez en las listas del SAE sin experiencia laboral previa. En toda la provincia suman 17.500, un millar más que el año pasado y por primera vez los hombres superan en número a las mujeres: 9.700, frente a las 7,8 demandantes femeninas que en 2010 pasaban de las 12.000.
fuente: http://www.lavozdigital.es/cadiz/v/20120128/cadiz/cadiz-bate-record-nacional-20120128.html
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