La actual sede de IU en Guadalajara es propiedad de la familia de E.G.E., un conocido neonazi de Guadalajara perteneciente a una conocida familia de la ultraderecha guadalajareña.
Posiblemente se sorprenda, incluso puede que piense que es mentira o una exageración, pero si usted hace un repaso por el desastroso periplo de esta organización lo verá perfectamente posible, o incluso lógico. Les invitamos a leer este breve análisis.
En febrero y marzo de 2005, en Guadalajara se vivieron diferentes movilizaciones antifascistas tras el apuñalamiento por parte de un dirigente local de falange a un joven de la localidad. Este hecho, que movilizó a centenares de jóvenes en diferentes protestas, acabó con una convivencia que se arrastraba desde la misma fundación de Izquierda Unida, y que llevó a la coalición a abandonar la histórica sede del PCE de la C/Chorrón 16 bajo(actual Centro Social Octubre).
El motivo de este cambio fue un alegato contra los militantes de IU que apoyaron tales manifestaciones y que expresaron sus críticas a lo que consideraban una derechización de la coalición, que lejos de apoyar a los manifestantes hizo causa común con asociaciones católicas, sindicatos, así como con el PP y PSOE.
Lo cierto es que el abandono de ese local tenía un trasfondo mucho más profundo. La coalición estaba viviendo una remodelación ideológica sin precedentes, que implicaba abandonar todo tipo de trabajo social y reorientarlo, en principio, a uno meramente institucional. Izquierda Unida abandonaba en marzo de 2005 la sede de Chorrón y se trasladaba a la C/Arcipreste de Hita 1, a menos de 20 metros de la Diputación Provincial donde forma, con un solo diputado provincial, gobierno con el Partido Socialista.
Hasta aquí todo sería normal, si no fuera porque este local es propiedad de una histórica familia de ultras, donde uno de sus componentes, E.G.E., es uno de los ultraderechistas más peligrosos del Corredor del Henares y cuya familia es conocida por su asentamiento social durante el franquismo y durante los negros años del terrorismo de Estado.
E.G.E., fue uno de los detenidos en el mes de julio por apuñalar en el cuello a un joven en las Fiestas de Yunquera de Henares (Guadalajara) y es uno de los implicados más visibles en la trama de las agresiones nazis en la provincia.
Una derechización escandalosa y un hombre clave
En mayo de 2003, Izquierda Unida accede con un solo concejal a la tenencia de alcaldía y forma coalición con el PSOE, liderado por el actual Diputado Nacional y vocal de la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados Jesús Alique López. El concejal de IU, Jordi Badel, es propietario de una correduría de seguros y director de la oficina del banco ING Direct en Guadalajara. Tras la firma del pacto de gobierno, su posición en determinados puestos de privilegio le concede amplia libertad para llevar a cabo contrataciones y adjudicaciones sin apenas control administrativo, lo que crea en la organización provincial un cierto nepotismo, donde en materias reservadas son empleados amigos, familiares o personal de confianza del concejal. Pero su puesto en el Ayuntamiento de Guadalajara suponía acceder a determinadas cotas de control y poder muy superiores a las mantenidas hasta entonces. Pero unos grupos empresariales ultraconservadores y muy reacios a llevar a cabo negocios con un “rojo” que era considerado un apestado entre estos mismos grupos hacen necesaria la presencia de alguien que esté bien posicionado entre el poder económico local.
Aquí entra en juego Jose-Antonio López Palacios, un ex falangista que tuvo una buena participación en el Movimiento Nacional en los últimos meses del franquismo, y que después tuvo un breve periplo en la organización anarcosindicalista Confederación Nacional del Trabajo (CNT) y Ecologistas en Acción, organizaciones que acabaron expulsándolo de sus filas.
López-Palacios es ese hombre tan bien posicionado que necesitaba Badel. Antiguo Director del Instituto de Enseñanza Secundaria Alejo Vera de Marchamalo, es una persona bien considerada por la derecha local. Es hijo del que fue Corresponsal de RTVE en Guadalajara durante el régimen fascista, y tiene a su nombre el Archivo Fotográfico Provincial “López-Palacios”, dedicado a su padre y custodiado por la Diputación Provincial. Además le une una gran relación afectiva con el abogado de la Plataforma de Familiares de Víctimas del Incendio de Guadalajara, Miguel Solano, abogado también de los grupos neonazis y de grupos inmobiliarios. Es además una persona respetada y apreciada por determinados dirigentes del Partido Popular.
En poco tiempo y a partir de 2003, López-Palacios tiene un ascenso meteórico en la organización. En 2004 es nombrado Secretario de Organización Provincial en una reñida asamblea dividida por la fractura entre “críticos” y oficialistas. Siempre se declaró como un furibundo anticomunista y desde el principio fue partidario de liquidar el actual Centro Social Octubre.
Entre él y Badel dieron la actual impronta a la organización. Depuraron a los elementos más críticos y reorientaron a IU hacia su trabajo institucional. Para ello no hacía falta una sede ubicada en un barrio obrero y que era conocida por miles de trabajadores en la provincia, simplemente hacía falta una sede administrativa cercana a los centros de poder locales. Esta liquidación de la sede se hizo con el aval del PCE, deseoso de deshacerse de ella dado las numerosas deudas contraídas por las sucesivas derrotas electorales de IU. Es el propio López-Palacios el que se encarga de buscar la nueva ubicación y él mismo la anuncia en un Consejo Político Provincial de la organización que se celebró el 14 de marzo de 2005 en Azuqueca de Henares, donde también se deciden las expulsiones de varios militantes críticos y la suspensión de la campaña de IU contra la Constitución Europea, con el aval de un miembro de la Ejecutiva Federal de Izquierda Unida que vino para dar apoyo a la Dirección en estas nuevas medidas.Centro Social Octubre
El plan hubiera sido perfecto. Solamente había un pequeño problema: la sede ya no estaba bajo el control de IU. Con una intensa actividad, los críticos, que posteriormente fueron expulsados de la coalición, reorganizaron la actividad social que se nucleaba en torno a ese local. Esto implicó una cierta “competencia” en el trabajo de IU en los movimientos sociales y particularmente entre la juventud, campos donde IU abandonó todo el trabajo.
Además, IU estaba embarcada, con estos dos hombres al frente, en la participación institucional en un momento de enorme crecimiento urbanístico y de especulación inmobiliaria a la que Izquierda Unida no fue ajena. Se participó en la aprobación de privatizaciones de empresas municipales y servicios públicos, se ampliaron las licencias de construcción sin ningún tipo de control y se desmovilizó el capital social que se había trabajado en el movimiento contra la guerra de Irak y Afganistán, devolviendo en 2007 al Partido Popular la mayoría absoluta que no consiguió en las municipales de 2003.Política municipal tras las elecciones de mayo de 2007
Izquierda Unida sufre un batacazo electoral sin precedentes. Consigue salvar su representación por muy poco margen y ya no está en el gobierno municipal. En Azuqueca de Henares(la segunda localidad de la provincia), la coalición pierde un concejal, pasando de tres a dos, y facilitando(por su condición de “bisagra”) el gobierno del PP durante seis meses en la alcaldía de la localidad, feudo histórico de la izquierda y del movimiento obrero.
En la capital, al no tener participación en la Junta de Gobierno, Badel cede el testigo al segundo de la lista Jose Luís Maximiliano, Coordinador Provincial de la Organización. Maximiliano es un militante rudo, que tiene dificultades para leer en público, que puede responder a gritos a los periodistas o que puede discutir a voces en los pasillos municipales. Siempre fue un escudero de Jordi Badel que nunca actuó solo, por lo que para él siempre fue necesario un apoyo de alguien que, como López-Palacios, pudiera salvarle los muebles. Es Policía Municipal, y no dudó en reprimir a porrazos las protestas vecinales que se dieron en el consistorio en los años 80-entre ellos, a militantes del PCE, al que luego se afilió-, cuando todavía la izquierda social tenía un peso considerable en Guadalajara. Ha tenido que pedir numerosas excedencias por fuertes presiones del cuerpo.
López-Palacios se estrena en esta legislatura 2007/2011 como liberado de la Diputación Provincial, a través del Grupo de IU en esta institución, en la que forma gobierno con el PSOE. IU tiene un solo diputado y el PSOE tiene doce. López-Palacios es uno de los liberados mejor pagados de la institución y se mueve con total soltura entre los sectores de derecha del PSOE.
Indudablemente ha sido el hombre necesario para el cambio estratégico de la organización. Su posición dentro de ella le ha facilitado el acceso a censos, direcciones, teléfonos de militantes y sus centros de trabajo. Su posición de cara al exterior ha llevado a moldear la imagen de IU ante el empresariado local y los medios de comunicación, alejándola de una postura “excesivamente radical”. Y su inserción entre los grupos de poder económico ha facilitado mucho las cosas a hombres como Jordi Badel, que nunca ha rendido cuentas realmente de su actividad como representante municipal. La derechización ha sido tal, que el propio Secretario de Organización ha conseguido alojar a la organización en un inmueble de la extrema derecha.
cambioydebate.com
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