Atentado contra Ángel Pestaña
Foto - La Bajada de San Ignacio en
Manresa, lugar donde fue cometido el atentado contra Pestaña (agosto de 1922)
El 25 de agosto de 1922 cae gravemente herido
en Manresa (Bages, Cataluña), en un atentado de pistoleros del Sindicato Libre,
el militante anarcosindicalista de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT)
Ángel Pestaña Núñez. A instancias de la Federación Local de Sindicatos de
Manresa Pestaña se había desplazado a la ciudad para dar una conferencia en el
Teatro Nuevo sobre el tema de la Unión Soviética y el problema social.
Sobre las 7 de la tarde, después de
salir con unos compañeros de la fonda donde se hospedaba en dirección hacia el
teatro y cruzar el torrente de Sant Ignasi, cerca de la calle de Cantarell,
lugar poco frecuentado, un grupo de tres pistoleros disparan a bocajarro seis
disparos sobre Pestaña huyendo de inmediato. Quienes acompañaban a Pestaña
salieron sanos y salvos y huyeron.
La primera persona que salió en
auxilio del sindicalista fue una chica que trabajaba en un prostíbulo cercano,
a la que ayudaron unos soldados del batallón de Reus; entre todos llevaron
rápidamente a Pestaña al hospital de Manresa. Pestaña recibió cuatro disparos:
en la cabeza, en la garganta, en el pecho y en el brazo; y el pronóstico fue
gravísimo. Pero la operación fue bien y permaneció a salvo, al menos
clínicamente hablando, ya que los asesinos permanecieron en la ciudad con la
intención de rematarlo.
Los médicos pidieron protección a las
autoridades ante la actitud de los pistoleros, que asediaban el hospital
decididos a acabar con la vida de Pestaña, y fue enviada a la Guardia Civil.
Todos los periódicos dieron la noticia y surgió una amplia respuesta solidaria
en contra del atentado (partidos políticos, ateneos, sindicatos,
intelectuales...) y de los métodos represivos empleados por los generales
Severiano Martínez Anido y Miguel Arlegui y Bayones, responsables de los
pistoleros del Sindicato Libre.
Los terroristas fueron perfectamente
identificados, pertenecían a la banda de Honorio Ingles y sus hombres eran
Isidre Miquel Viñals –que fue quien disparó–, Joan Pladevila ( Joan de la Manta
) y Vilajoana ( el Trompi ); y fueron detenidos, pero liberados de repente y
nunca fueron procesados. Ángel Pestaña se restableció felizmente de sus
heridas.
ALEN
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