Marcelino Bilbao Bilbao
El 16 de enero de 1920 nace en Alonsotegi (Vizcaya, País Vasco) el miliciano confederal Marcelino Bilbao Bilbao. Abandonado por sus padres biológicos en la orilla del río Kadagua a su paso por Alonsotegi, no se conoce con exactitud la fecha y lugar de nacimiento, pero lo más probable es que sean los datos apuntados. Fue acogido por la familia López-Iglesias, numerosa y humilde, y el niño tomó los linajes de expósito Bilbao Bilbao.
Cuando tenía 12 años el maestro le obligó a abandonar la escuela y tuvo que empezar a trabajar temporalmente con su padre en la mina «La Primitiva» de Kastrexana. Poco después comenzó a trabajar en la fábrica de hilaturas de yute «Rica», lugar donde debutó en el activismo político. Al amparo de su hermano Jesús, cuando tenía 13 años comenzó a participar en diversas manifestaciones, huelgas y sabotajes que se realizaban en Bilbao durante la II República. Afiliado a las Juventudes Socialistas Unificadas (JSU), cuando estalló la guerra se añadió a un grupo de anarquistas movilizados para hacer frente al levantamiento fascista en el País Vasco.
En septiembre de 1936, cuando se formaron los primeros batallones anarquistas, se integró en el «Batallón Isaac Puente» de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT). En el primer encontronazo con el ejército franquista, destacó en una acción valerosa y se ganó el afecto de los compañeros anarquistas que en principio habían desconfiado por su filiación comunista. Entre febrero y marzo de 1937 el «Batallón Isaac Puente», integrado en la I Brigada de las Brigadas expediciones Vascas, luchó por la conquista de Oviedo; pero tuvo que volver al País Vasco para frenar el ofensiva del general Emilio Mola sobre Vizcaya.
El 26 de abril de 1937 fue testigo del bombardeo de Guernica, donde ayudó a la población civil a evacuar la ciudad. Después continuó luchando con efectivos asturianos a Sollube y Peñas de Lemona y fue herido en dos ocasiones. Tras la caída de Bilbao fue nombrado teniente, grado con el que combatió hasta el final de la guerra. Cuando Santander cayó en manos fascistas, los batallones vascos «Isaac Puente», «Larrañaga» y «Zabalbide» continuaron luchando en la zona norte de la Península hasta el final de la contienda. En Asturias, el «Batallón Issac Puente» destacó en los combates del Mazuco y por estas acciones esta tropa fue condecorado por el presidente del Consejo de Asturias, Belarmino Tomás, con la Medalla de la Libertad, entregada al comandante Antonio Teresa de Miguel. Con la derrota del frente norte,quinta columna les disuadir y finalmente consiguieron embarcar en Avilés rumbo a Burdeos.
Más tarde pasó a Cataluña en tren y, tras unos días de descanso en Figueres con las Brigadas Internacionales, en diciembre de 1937 se encuadró en la 63 Compañía de Ametralladoras Maxim de la Defensa Especial Contra Aviones (DECA) como responsable de tres ametralladoras antiaéreas que se transportaban con camiones Katiuska. En febrero de 1937 participó en la batalla de Teruel, donde conoció Valentín González ( El Campesino). Tras el fracaso de la ofensiva sobre Teruel, la compañía retrocedió por el río Segre hasta Lleida, donde coincidió con El Campesino y Enrique Líster. A finales de 1938 fue trasladado a la Batería 528 Oerlikon de la DECA y el 9 de febrero de 1939 pasó la frontera por La Jonquera. En Francia pasó por varios campos de concentración: San Cipriano, de donde intentó huir sin resultado; Argelès; y Gurs, donde conoció José María Aguirre Salaberria, futuro cuñado. Después fue trasladado a Tarbes, donde fue obligado a ingresar en la 25 Compañía de Trabajadores Extranjeros (CTE). Pase de una corta estancia en septfonds, con José María Aguirre, fue enviado a trabajar a la Línea Maginot.
En junio de 1940 fue hecho prisionero por los nazis en Épinal y trasladado al campo de concentración de Estrasburgo, con la identificación número 3.293. El 13 de diciembre de 1940 fue enviado al campo de Mauthausen con el número 4.628, donde encontró conocidos, tales como Ángel Elejalde. A Mauthasen sufrió la cantera y un experimento del doctor Aribert Heim (inyecciones de benceno en el corazón), del cual, de 30 prisioneros, sólo sobrevivieron siete. El 10 de abril de 1944 fue trasladado al campo anexo de Ebensee, donde consiguió colocarse en las cocinas. Participó en el aparato de resistencia, que propiciará la liberación del campo el 5 de mayo de 1945. Después de una odisea toda Austria con otros compañeros, llegó a pie en París.
Ante la imposibilidad de volver a la Península, se estableció en casa del compañero José María Aguirre a Châtellerault, donde conoció su futura compañera Mercedes Aguirre y con quien tendrá dos hijas. Para ganarse la vida hizo de lechero durante 17 años y en su tiempo libre jugó al fútbol con el equipo de Dissay. Después, durante 15 años y hasta su jubilación, trabajará en una fábrica petroquímica. En esta fábrica de 300 empleados, se afilió a la Confederación General del Trabajo (CGT) francesa, sumergiéndose en el mundo sindical. 1969 su testimonio fue recogido en el libroTriángulo Bleu. Las républicains espagnols à Mauthausen (1940-1945) , de Manuel Razola y Mariano Constante. 2002 Euskal Telebista (ETB) estrenó el documental Esclavos vascos del III Reich , donde prestó su testimonio. El 18 de junio de 2006 recibió en el monte Artxanda de Bilbao, con otros compañeros de las milicias confederales vascas, un homenaje oficial de la CNT.
Marcelino Bilbao Bilbao murió el 25 de enero de 2014 a Châtellerault (Poitou-Charentes, Francia). En 2014 Montserrat Llor publicó Vivos en el averno nazi donde se narra su odisea.
ALEN
No hay comentarios:
Publicar un comentario