Ricardo Flores Magón – precursor de la revolución mexicana
El 21 de noviembre de 1922 muere en la cárcel de Leavenworth
(Kansas, EEUU) el periodista, escritor, dramaturgo y militante anarquista
Cipriano Ricardo Flores Magón. Había nacido el 16 de septiembre de 1873 en San
Antonio Eloxochitlán (Teotlitán del Camino, Oaxaca, México). Hijo de una
familia humilde de tradición liberal juarista; sus padres fueron Margarita
Magón, de origen mestizo (padre español y madre indígena), y Teodoro Flores, un
indígena nahua puro que combatió en la Guerra de Intervención Norte- americana
(1846-1848) y en las filas del ejército liberal de Benito Juárez contra los
invasores norteamericanos durante la Guerra de Reforma (1857-1868) y más tarde se
levantó en armas contra el Imperio de Maximiliano en la Sierra de Juárez
(1864-1867). Los primeros años de su vida de Ricardo Flores Magón
transcurrieron en el Estado de Oaxaca, donde convivió con indígenas de la
Sierra Mazateca, donde su padre era considerado tata (cabeza) por su
experiencia; de él recibió las enseñanzas sobre el pensamiento indígena que
contenía principios de un comunismo libertario autóctono, sencillo, justo,
equitativo, sin imposiciones ni tiranías, que más tarde delinear con la lectura
de los pensadores anarquistas.
Con ocho años emigró con su familia a la Ciudad de México en
busca de mejores condiciones de vida, donde hizo estudios en la Escuela
Nacional Preparatoria y comenzó la carrera de abogado en la Escuela Superior de
Jurisprudencia, la cual no concluyó. En 1893 participó en los disturbios
estudiantiles en contra de la tercera reelección a la presidencia de México del
general Porfirio Díaz, y ese mismo año comenzó a colaborar como periodista en
la publicación opositora El Demócrata. En 1900, junto con sonido hermano Jesús,
fundó el periódico jurídico Regeneración; un medio independiente desde donde
critican la corrupción del sistema judicial del régimen dictatorial de Porfirio
Díaz, originando de esta manera su encarcelamiento. En 1901 asistió al Primer
Congreso de Clubes Liberales en San Luis Potosí, donde ataca con rudeza el
gobierno de Díaz. En consecuencia, el periódico fue suprimido y Ricardo Flores
Magón fue nuevamente encarcelado. En 1902 toma a su cargo la publicación del
periódico satírico antiporfirista El Hijo de El Ahuizote, donde colaborará José
Guadalupe Posada realizando agudas caricaturas críticas contra el régimen de
Díaz.
El 5 de febrero de 1903 colocan en el balcón de las oficinas
del periódico un gran crespón negro en señal de duelo y la frase «La
Constitución ha muerto", refiriéndose a la Constitución de 1857,
promulgada también un 5 de febrero. Ricardo Flores Magón fue detenido una vez
más y cuando fue liberado se exilió en Estados Unidos en 1904. Durante su exilio
norteamericano volverá a publicar el periódico Regeneración y en 1905 participó
en la constitución de la Junta Organizadora del Partido Liberal Mexicano. El 1
de julio de 1906 presidió la fundación del Partido Liberal Mexicano (PLM),
junto con Juan Sarabia, Antonio I. Villarreal, Librado Rivera, Manuel Sarabia,
Rosalío Bustamante y Enrique Flores Magón. Entre los postulados del nuevo
partido político había ideas muy revolucionarias para aquella época, como las
supresiones de la reelección y de la pena de muerte para los presos políticos y
comunes, la obligatoriedad de la enseñanza elemental hasta los 14 años, la
establecimiento de un salario mínimo, la expropiación de latifundios y de
tierras ociosas, así como la regulación y la reducción de las jornadas de
trabajo. A principios de 1908 el periodista John Kenneth Turner realizó un
viaje a México motivado por la descripción de la situación social que Flores
Magón describía y entrevistará a la cárcel.
Durante este período entablará relación con María Talavera
Brousse, quien será en adelante su compañera sentimental. Francisco I. Madero,
que encabezó el levantamiento antireeleccionista en 1910, lo invitó a adherirse
al Plan de San Luis para derrocar Porfirio Díaz, sin embargo, Ricardo Flores
Magón rechazó el ofrecimiento por considerar que la causa maderista era una
rebelión burguesa carente de propuestas sociales. Para Flores Magón la
revolución política de Madero era insuficiente. Consideraba que ésta se había
de impulsar junto con una revolución económica y que era necesaria la abolición
del Estado y de la propiedad privada. Durante los años siguientes tuvo contacto
con los revolucionarios Francisco Villa y Emiliano Zapata sin aliarse con
ellos. Aunque las actividades secretas de la Junta del PLM y la destrucción de
sus archivos en las numerosas violaciones policiales de los locales hacen
imposible contar con evidencias, testimonios posteriores afirman que existió
correspondencia entre Flores Magón y Zapata y que incluso hubo una invitación
porque la Junta del PLM se trasladara a Morelos donde tendría papel e imprenta
para publicar Regeneración en todo el ámbito nacional, pero a pesar de todo
esto nunca se concretó. El activismo de Flores Magón en el exilio sirvió de
ejemplo a anarquistas ya socialistas estadounidenses, principalmente militantes
del sindicato anarcosindicalista Industrial Workers of the World (IWW, Obreros
Industriales del Mundo).
En enero de 1911 organizó desde Los Ángeles (California) una
rebelión en Baja California, al igual que otros insurrecciones que desde 1906
se impulsaron por toda la frontera con Estados Unidos para esparcir la
revolución social al resto de México, pero las actividades armadas del PLM no
consiguieron influir en el conjunto del movimiento armado que estalló en 1910. Tras
la derrota en la Baja California, la Junta Organizadora encabezada por Ricardo
Flores Magón continuó sus actividades en California, pero entonces el PLM se
dividió al surgir otro grupo de tendencia moderada y acercado a Madero que se
constituyó en la Ciudad de México, y que editó su propia versión de
Regeneración y que se desató de la Junta Revolucionaria Anarquista de Los
Ángeles. En respuesta la Junta en California publicó un manifiesto de rasgos
netamente anarquistas. La conquista del pan de Kropotkin, que los liberales
consideraban como una especie de biblia anarquista, sirvió de base teórica para
las efímeras comunes revolucionarias durante la Rebelión de Baja California de
1911. Flores Magón vivió en los Estados Unidos de los de 1904, la mitad del tiempo
encarcelado, llevado de una ciudad a otra.
En 1918 publicó, junto con Librado Rivera, un manifiesto
dirigido a los anarquistas del mundo, el cual motivó que ambos fueran
encarcelados y sentenciados a 20 años de prisión ya 15 respectivamente acusados
de sabotear el esfuerzo bélico de Estados Unidos de " fomentar el ideal
democrático ", ya que entonces participaban en la Primera Guerra Mundial.
Ricardo Flores Magón fue encerrado en la penitenciaría de la isla McNeil, en el
Estado de Washington. Muy enfermo y casi ciego, fue trasladado a la prisión de
Leavenworth (Kansas) donde murió la noche del 20 al 21 de noviembre de 1922.
Existen tres versiones sobre su muerte: el oficial dice que murió de una angina
de pecho, la segunda, según su compañero y amigo Rivera, afirma que fue colgado
en la celda, y la tercera explica que Fue apaleado hasta la muerte por los
guardianes de la prisión.
Su cuerpo embalsamado fue trasladado a México bajo los
auspicios del Sindicato de Trabajadores Ferroviarios para sepultarlo.
Irónicamente, una vez muerto, el Estado contra el que tanto luchó Flores Magón
comenzó a reconocerlo como el gran precursor de la Revolución mexicana. El 1 de
mayo de 1945, sus restos fue trasladados a la Rotonda de los Hombres Ilustres
de la Ciudad de México. Ricardo Flores Magón estudió las ideas y las obras de
distinguidos anarquistas contemporáneos (Mikhail Bakunin, Pierre-Joseph
Proudhon, Élisée Reclus, Charles Malato, Errico Malatesta, Anselmo Lorenzo,
Emma Goldman, Fernando Tarrida del Mármol, Max Stirner, etc.). Aunque se acercó
a las obras de Karl Marx y de Henrik Ibsen, fueron los trabajos de P'otr
Kropotkin los que más influyeron en la construcción de su propia concepción de
lucha revolucionaria.
Su anarquismo se formó en parte de acuerdo a las bases del
liberalismo mexicano, pero teniendo en cuenta el sentido de autonomía y de
comunidad de los pueblos indígenas. Aparte de sus escritos periodísticos y
políticos, sus ideales de justicia social y de libertad para los humildes quedó
plasmados en dos obras teatrales revolucionarias: Tierra y Libertad y verdugos
y víctimas, ambas publicadas póstumamente en 1924 y donde criticaba duramente
la sociedad burguesa .
En los años 80 del siglo XX surgió una organización de
pueblos indígenas mexicanos en el Estado de Oaxaca, el Consejo Indígena Popular
de Oaxaca "Ricardo Flores Magón" (CIPO-RFM), que lleva su nombre en
su memoria.
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