El pasado 15 de Agosto el Boletín Oficial del Estado publicaba el Real Decreto 10/2009 sobre Protección Temporal por Desempleo e Inserción. Finalmente la tan anunciada y publicitada ayuda a los parados sin subsidio ha sido más decepcionante aún de lo que se esperaba: solo podrán acceder a esta prestación los que hayan agotado el Desempleo a partir del 1 de Agosto de 2009. Las condiciones de acceso son claramente discriminatorias e injustas, pues dejan al margen justamente a quienes más lo necesitan por llevar más tiempo desprotegidos.
Resulta indignante que mientras el Gobierno ha puesto a disposición de la gran Banca casi 200.000 millones de euros, para los cientos de miles de parados sin cobertura sólo piensa destinar poco más de 600 millones de euros. El presidente del Gobierno se muestra dispuesto a revisar y negociar nuevamente con los sindicatos oficiales las condiciones de acceso a este subsidio, pero es más que probable que se limiten únicamente a ampliar en un par de meses (hasta el 1 de Junio) el plazo, con lo que la mayoría de los parados sin cobertura seguirían sin tener derecho a cobrar.
Además, la ridícula cuantía de esta prestación temporal 421,79 euros al mes y la escasa duración (solo 6 meses) hacen que deba ser considerada más que nada como una limosna destinada a maquillar las cifras del paro, pues quienes se acojan a este subsidio están obligados a realizar un curso de formación ocupacional con lo que automáticamente dejan de contar como parados.
Resulta indignante que mientras el Gobierno ha puesto a disposición de la gran Banca casi 200.000 millones de euros, para los cientos de miles de parados sin cobertura sólo piensa destinar poco más de 600 millones de euros. El presidente del Gobierno se muestra dispuesto a revisar y negociar nuevamente con los sindicatos oficiales las condiciones de acceso a este subsidio, pero es más que probable que se limiten únicamente a ampliar en un par de meses (hasta el 1 de Junio) el plazo, con lo que la mayoría de los parados sin cobertura seguirían sin tener derecho a cobrar.
Además, la ridícula cuantía de esta prestación temporal 421,79 euros al mes y la escasa duración (solo 6 meses) hacen que deba ser considerada más que nada como una limosna destinada a maquillar las cifras del paro, pues quienes se acojan a este subsidio están obligados a realizar un curso de formación ocupacional con lo que automáticamente dejan de contar como parados.
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