PATRIMONIO SINDICAL HISTÓRICO
La CNT denuncia el trato discriminatorio que sufre
La CNT solicitó por escrito, el pasado mes de octubre, una reunión con el Ministro de Trabajo para tratar todo lo relacionado con el Patrimonio Histórico. Posteriormente se ha insistido por parte de CNT, vía telefónica con altos dirigentes del Ministerio de Trabajo, en la necesidad y urgencia de mantener dicho encuentro. A día de hoy el Ministerio no ha dado respuesta concreta a esa petición. La aprobación de la nueva norma legal sobre la devolución del patrimonio sindical histórico, que establece como límite el mes de enero próximo para cerrar la cuestión, no ha hecho considerar al Gobierno la obligación que tiene de escuchar, informar y atender en lo posible a una organización como la CNT, con una presencia más que significativa antes y durante la Guerra Civil española.
Asimismo, se le ha hecho llegar una petición expresa de que se nos remitan todos los expedientes de devolución de patrimonio abiertos, que se nos dé acceso a los fondos documentales de las incautaciones, y que se nos remita listado y copia de todos lo expedientes administrativos de lo compensado y reintegrado hasta ahora. La respuesta ha sido igualmente nula. De esta forma, no puede entenderse la actitud del Gobierno de otra forma que no sea la de entorpecer el proceso para la CNT.
Conclusión de los trabajos de investigación y documentación
El pasado fin de semana se ha reunido en Madrid el equipo de investigación y los responsables de Patrimonio de toda la Confederación. En esa reunión se han ultimado todos los trabajos sobre las reclamaciones de bienes inmuebles, cuentas bancarias, bienes muebles, bienes documentales y bienes culturales que se le incautaron a la CNT en el periodo 1936-1939. En el mes de enero se elevará esa petición íntegra al Ministerio de Trabajo. Urge, pues, una primera toma de contacto.
Insulto a la memoria histórica
La valoración de nuestro patrimonio histórico que se ha divulgado por el gobierno es ridícula (3,7 millones de euros). El trato desigual que venimos sufriendo desde hace años en este asunto es un flaco favor a la memoria histórica de los perdedores de la Guerra Civil. Esa memoria histórica que tanto les gusta usar de escaparate progresista al Gobierno se respeta siendo honestos con el uso del patrimonio que se les expolió a las organizaciones obreras. Ese patrimonio se constituyó de abajo arriba: cada sociedad obrera y cada sindicato local fue constituyendo un patrimonio de inmuebles, bibliotecas, fondos de socorros mutuos y otros bienes con mucho esfuerzo de las personas que estaban afiliadas. Ahora, sin embargo, ese inmenso patrimonio económico y emocional se usa de forma partidista.
Es un insulto a la memoria de aquellas personas, incluso a la de los militantes socialistas, que se devuelva ese patrimonio más en función de las urgencias financieras ocasionadas por el inmenso agujero económico de la PSV, que por una razón de justicia histórica.
Desdén del Ministro de Trabajo
El desdén con el que el Ministro de Trabajo está resolviendo nuestra petición de diálogo es una muestra de ese trato discriminatorio que denunciamos. Es una viva prueba de lo hueras que fueron sus palabras en el congreso de los Diputados cuando hablaba de “justicia histórica”.
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