Caso Almería: Las vergüenzas de la Transición
La justicia y la memoria tienen
asuntos pendientes con la llamada Transición española. Uno de los más
significativos –y sombríos – es el que tiene que ver con Luis Cobo Mier, Luis
Montero García y Juan Mañas Morales. En la madrugada que transcurre entre los
días 9 y 10 de mayo de 1981 se gesta el conocido como Caso Almería. Esa noche
son arrestados por la Guardia Civil en la localidad de Roquetas de Mar estos
jóvenes trabajadores residentes en la provincia de Santander (aún Cantabria no
disponía de Estatuto de Autonomía) cuando, al parecer, son erróneamente
reconocidos en el transcurso de su viaje de Santander a Almería como militantes
de ETA.
"Mi querida familia, ante el
respeto que merecen me dirijo a Vds. para contarles el hecho siguiente respecto
a las extrañas circunstancias de la desgracia de buestro (sic) hijo y
compañeros que fallecieron en manos de los asesinos de la Comandancia [de la
Guardia Civil] de esta localidad". Así comenzaba una carta anónima escrita
por un agente del cuerpo policial militarizado que fue remitida a la familia de
Mañas Morales tres años después del asesinato de los tres jóvenes y en la que
daba cuenta de las torturas y la forma en la que once guardias civiles acabaron
con los trabajadores.
Los
motivos y las circunstancias del viaje