Está por ver, sin embargo, si los responsables de la Junta en Cádiz les convocan, como han solicitado los representantes sindicales, a una reunión previa a dicha comisión, con el objetivo de que la cita de Sevilla sirva para llegar a acuerdos y no para realizar propuestas.
En cuanto al calendario de movilizaciones de la antigua plantilla, ayer protagonizó un nuevo acto de protesta. Esta vez, el lugar elegido fue la plaza Asdrúbal, en la capital gaditana, frente a la sede de la Delegación Provincial de Empleo. El motivo era, como expresaron los representantes sindicales que acompañaban a los ex empleados, era "devolver las gorritas al delegado de Empleo, Juan Bouza". Esta forma de manifestarse se debía a las declaraciones realizadas días atrás por el propio Bouza en las que aseguró que "Delphi ya no está, y como no está, se tienen que quitar la gorrita de Delphi".
Desde alrededor de las diez y media de la mañana, los ex operarios fueron llegando al lugar de reunión, todos ataviados con gorras o prenda similar. A los pocos minutos, hizo acto de presencia la unidad antidisturbios de la Policía Nacional, lo que provocó que el colectivo lanzase insultos y gritos en contra. No obstante, no hubo ningún altercado, más allá de la tensión vivida en determinados instantes, y siempre a distancia.
La sorpresa de la mañana se la llevó un grupo de algo más de medio centenar de desempleados de La Línea, que había acudido también a Asdrúbal con la intención de trasladar también a Bouza su mensaje, la necesidad de que la ciudad linense reciba ayuda por parte de la Administración. Como aseguró el portavoz de la plataforma de parados, Juan Manuel Heredia, La Línea tiene ya 10.800 desempleados. Incluso, su alcalde, Alejandro Sánchez (PP), acudió junto a este grupo y se dirigió al interior de las dependencias de Empleo con la intención de ser recibido por el delegado provincial, pero se volvió sin poder conseguirlo.
La misma suerte corrieron los delegados sindicales de Delphi, quienes solicitaron un breve encuentro con Bouza quien, "por motivos de agenda" tampoco pudo recibirlos. Al respecto, el responsable de USO en la comisión de seguimiento, Miguel Paramio, explicó ayer a este periódico que "la plantilla esperaba que el delegado de Empleo nos recibiera aunque fuera por diez minutos, sobre todo después del acercamiento que se había producido tras la última reunión con Francisco González Cabaña, para intentar calmar los ánimos. Podría haber quedado a la altura que se le presupone a un cargo como el que tiene, pero no ha sido así, es otra provocación más".
Asimismo, Paramio criticó "las formas" en las que "han vuelto a comportarse algunos antidisturbios". A su juicio, "la gente no ha hecho hoy nada ni se podía dar a entender que hicieran falta los antidisturbios". Hoy sábado, el colectivo se sumará a la manifestación convocada por UGT y CCOO.
Por último, fuentes sindicales explicaron ayer que el trabajador herido en los disturbios del pasado lunes fue operado ayer "con éxito". La intervención duró algo más de una hora y, según estas fuentes, podría recibir el alta la próxima semana. Todo dependerá, añadieron, de si los médicos especialistas en oftalmología consideran que la tensión del ojo afectado por el golpe se ha regularizado.
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