Páginas

sábado, 2 de enero de 2010

Un año más: ya van 100


No os extrañe que durante este 2010 tan sólo oigáis del CeNTenario en nuestras conferencias, en internet y en nuestra prensa.
Abre el noticiario con un reportaje sobre la guerra de Afganistán, bajo el auspicio de la ONU pero sin cascos azules. Me pregunto: ¿Por qué ya no nos recuerdan la operación made in USA Libertad durarera (sic) y la participación otanista ISAF (Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad)? Nos plantea la voz en off la salida de las tropas de ocupación como una opción para acto seguido pasar a describir un atentado en Pakistán sin reivindicar pero atribuido ad hoc a los talibanes. No es casualidad que pasara por allí Hillary Clinton. Un fundido de sangre sobre señora rubia famosa hiere más la sensibilidad del espectador. Estamos demasiado acostumbrados al rojo sobre pieles oscuras.
Segunda noticia: el cambio climático y sus efectos de India al Ártico. Resulta que uno de los efectos beneficiosos del calentamiento global y el consiguiente deshielo ha sido la apertura de nuevas rutas marítimas no sólo para el comercio y la posible prospección de recursos naturales (esto no lo comentan, pero el espectador no consigue inhibirse totalmente de razonar ante la caja tonta) sino incluso para el turismo. Pero toda cara tiene su cruz, y los indefensos animalitos árticos se ven amenazados por la marabunta güiri por lo que las potencias noratlánticas han mandado sendos destacamentos de la marina para proteger a los osos polares de los sanguinarios turistas. ¿Qué cadena piensas que perpetró este cúmulo de despropósitos béliconoticieros? No fue Antena3, no. Ni Telecinco. Se trata de la La 2 Noticias 24h del 28 de octubre. Sí, has leído bien, el telediario más chachi (premio a la independencia informativa festival PopArt Cáceres 2009). Según Chomsky y otros aguafiestas los mass media cumplen un papel fundamental en las sociedades democráticas pues al handicap de la existencia de una opinión pública que ponga en tela de juicio sus políticas los gobernantes requieren de medios de información (debería decirse propaganda) que sirvan de vehículo para sus consignas.
El 1 de diciembre, Obama, flamante Nobel de la Paz 2009, regala a los afganos 30.000 soldados ocupantes más. Los muchachos de la OTAN no USA serán otros 5.000 aunque aquí los líderes mundiales (eufemismo de jefes: a mayor sofistificación bélica y rango militar más lejos se encuentran los que mandan de las tropas) miran para otro lado a ver quien es el primer pardillo.
Otro ejemplo, ahora de la prensa diaria: esfuerzo le debió costar al manifestante retratado en la portada del ABC del 2 de abril abrirse la cabeza a hostias contra la policía. Pues lo que para cualquier lector con dos dedos de frente se trataba de un ciudadano que había sufrido un exceso profesional de un miembro de las fuerzas de seguridad del estado (ACAB, en el inglés original), para el redactor del titular se trataba de un antisistema que la había emprendido "a golpes contra la crisis".
Deberíamos valorar si retiramos la nota de la página 2: "[El periódico cnt] procura ser lo más plural posible dentro de las lógicas inclinaciones ideológicas que tiene el ser vocero de una central anarcosindicalista". Total, para qué advertir la parcialidad, si perlas como ésta nos dejan en tan buena posición. No veremos en El País advertir sobre la colisión de intereses con el Gobierno por culpa de una ley audiovisual que les pone en desventaja respecto a otro grupo mediático. Ni en Telecinco decir en cada cabecera informativa sobre la relación de dicho canal con el imperio mediático de Silvio Berlusconi. Por supuesto en ninguno de los tropecientos medios de comunicación bajo la batuta de Rupert Murdoch. Auténtico Hearst del siglo XXI. Que pena no contar con un Orson Welles Jr.
Este periódico lleva acompañando a la clase obrera, siempre que nos han dejado, desde 1932. Solidaridad Obrera, cabecera decana del anarcosindicalismo español desde 1907. Entre medias, consecuencia en parte de la segunda y causa del primero se sitúa la consitución de la Confederación Nacional del Trabajo en 1910. Tan sólo otra organización sindical española, la UGT puede presumir de haber llegado a la centena. Ninguna otra de haber aglutinado la mayor fuerza e inteligencia del movimiento obrero ibérico. Por algo fuimos hasta el franquismo el mayor sindicato de este país, el primero en luchar por la equiparación laboral entre sexos, la jornada de ocho horas, el reparto justo del trabajo... Por algo se decretó la jornada de 8 horas en la segunda década del siglo pasado (huelga de la Canadiense), firmamos la de 36 horas en la construcción (huelga sevillana 1936), había políticas activas contra el paro en los pueblos jornaleros andaluces (contratación obligatoria por parte de los patrones). Por algo fuimos corresponsables del mayor experimento revolucionario que haya conocido la humanidad: la autogestión-comunismo libertario de amplias zonas de la Península republicana en 1936-1939. Por la Idea que da sentido y coherencia a esta organización. ¿Qué idea? La anarquía. Saber que políticos y empresarios no son necesarios. Que podemos vivir sin capitalismo y sin estado y que en el camino a esa sociedad ideal no podemos caer en sus tretas, o sea que no todo vale.
Pues bien, no os extrañe que durante este 2010 tan sólo oigáis del CeNTenario en nuestras conferencias, veáis los actos en internet y leáis las crónicas en nuestra prensa porque los mass media hace ya mucho que dejaron de preocuparse por la apariencia para mostrar únicamente su cara más tétrica: la cara del poder.

No hay comentarios:

Publicar un comentario