Páginas

domingo, 18 de octubre de 2015

36 AÑOS SIN RESPUESTAS DEL ACCIDENTE MINERO DEL POZO MARIA


36 años sin respuestas del accidente minero del Pozo María

Hacia las 19.30 h. del miércoles 17 de octubre de 1979 un accidente minero en la capa 13 del pozo María de Caboalles provocó la muerte de diez mineros: Basilio Uría Cangas, Manuel Gómez Díaz, Adolfo Real Suárez, Emilio Pinillas Álvarez, Arselí Fernández Díez, Otilio Álvarez Fernández, Antonio Restrepo Vior, Manuel González Acero, José Auviaña Díaz y Alfredo Prieto Suárez. A 150 metros de profundidad la mina segaba la vida de quienes trabajaban en ella para mantener a sus familias. Tenían entre 19 y 46 años y seis de ellos tenían hijos.

36 años después los interrogantes sobre el accidente minero más grave de la historia de Laciana siguen, puesto que aunque la versión de la empresa fue que el terrible accidente se había debido a un derrumbamiento seguido de una explosión de grisú las versiones de los sindicatos apuntaron en cambio a una explosión por acumulación de grisú, no detectadas por graves deficiencias en la instalación propiedad de la Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP). Dos días duró el rescate, hasta que el cuerpo de Manuel González Acero fue rescatado del interior del pozo gracias al trabajo de 2.000 mineros de la todopoderosa empresa de la que era dueña familias de raigambre franquista como los Botín, los Villalonga o los Ussía.

Los entierros de los diez mineros en sus localidades fueron multitudinarios, y especialmente emotivo el de Caboalles, de donde eran la mayor parte de las víctimas. Cuentan las crónicas periodísticas de la época que el silencio en Villablino en aquellos días era impresionante y que las calles estaban llenas de banderas de España con crespones negros como nunca se ha vuelto a ver.

En el año 2004 los testimonios y la investigación recogidos en la Revista El Mixto contribuyeron a dar luz a los hechos reales de este terrible accidente, el más grave de la historia minera de Laciana. El grupo María fue cerrado en el año 2000 y hoy es pasto del inexorable paso de la naturaleza.

Pese a las denuncias sindicales de deficiencias en la instalación como causa del terrible accidente nunca se inició una investigación oficial, que explicaba que se trataba de un hundimiento y una posterior explosión de grisú que provocó más derrumbes y la presencia de monóxido de carbono en la galería, resultando todo ello fatal para los mineros. Pero la sensación entre los mineros y Laciana es que el accidente del Pozo María no solo pasó a la historia por ser el más graves, sino también por ser, quizás, el más olvidado.


No hay comentarios:

Publicar un comentario