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miércoles, 2 de julio de 2014

ADA MARTIN - ESCRITORA, PERIODISTA Y ANARQUISTA


Ada Martin – escritora, periodista y anarquista

 El 1 de julio de 1915 nace en Barcelona (España) la escritora, periodista e intelectual anarquista María de la Concepción Martín Fuster, más conocida como Ada Martín. Nacida en una familia de clase media catalana, estudió psicología y fue alumna del médico anarquista Félix Martí Ibáñez. En estos años de estudiante, formó parte del grupo de afinidad libertario y de la escuela racionalista «Los Idealistas Prácticos», fundado por Martí Ibáñez, y fue una destacada militante de la Federación Estudiantil de Conciencias Libres (FeCl), a Además de frecuentar los círculos independentistas catalanes. Intelectual cultísima, vivía en Poblesec de Barcelona, en una habitación llena de libros. Escribía en catalán y en castellano, conocía profundamente importantes filósofos y escritores (Kierkegaard, Schopenhauer, Nietzsche, Unamuno, Freud, Reich, Romand Rolland, Gide, Rabelais, etc.) Y se cartearse con Pío Baroja, a quien consideraba su maestro. Durante los hechos revolucionarios de octubre de 1934, fue herida cuando defendía, junto con el independentista Jaume Compte Canelles, la sede del Centro Autonomista de Dependientes del Comercio y de la Industria (CADCI).

Entre abril y octubre de 1936 publicó dos relatos de la serie «La Novela ideal», publicada por las ediciones de La Revista Blanca. Fue una asidua de las tertulias que todas las tardes se celebraban en el cuarto piso de la «Casa CNT-FAI», organizadas por Rodolfo González Pacheco y en las que intervenían destacados libertarios (Simón Radowitzki, Vicente Tomé, Antonio Casanova Prado, Dolores Cascante, José María Lunazzi, etc.). En estas tertulias se enamoró de Lunazzi, entonces miliciano de la «Columna Durruti», con el que rompió la relación tajantemente el día que lo vio vestido de militar. Participó activamente en los "Hechos de Mayo" de 1937. En julio de ese año participó en el Pleno Local Anarquista de Barcelona ya finales de año fue delegada por Barcelona en el Congreso de la FeCl celebrado en Valencia donde se fundó, con el apoyo del Sindicato de Profesiones Liberales de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), la Federación Ibérica Estudiantil Revolucionaria (Fiera), que publicó la revista Fuego, la cual dirigió. Se enfrentó a Serafín Aliaga, del Comité Peninsular de la Federación Ibérica de Juventudes Libertarias (FIJL), porque ella consideraba que la Fiera no debía circunscribirse sólo a la teoría y que tenía que jugar un papel importante en la práctica de la FIJL.

Durante toda la guerra colaboró ​​asiduamente con "Mujeres Libres», ocupó la corresponsalía de Fragua Social en Barcelona y fue reportera en el frente de la revista Nosotros, además de dirigir Evolución. Participó en los Institutos Obreros, que tenían como objetivo facilitar los estudios superiores a los jóvenes obreros, aunque su tarea no fue fácil debido al alistamiento de estos. Durante los años bélicos colabora en diferentes publicaciones libertarias, como Acracia, El Amigo del Pueblo, Criticón, Días de Fuego, Esfuerzo, Estudios, Evolución, Fragua Social, Fuego, Libre-Studio, Mi Revista, Mujeres Libres, nosotros, Ruta, Tierra y Libertad, etc. Mantuvo posiciones anticolisión colaboracionista, por lo que fue nombrada Piel Roja, y criticó la deificación de determinados militantes (Durruti, Ascaso, etc.). En 1939, con el triunfo franquista, pasó a Francia y fue recluida en el campo de concentración de Argelès. Durante la II Guerra Mundial llevó una vida nómada y semiclandestina, ayudando como pudo los refugiados españoles concentrados en los campos desde varias agrupaciones y sin participar en la Resistencia francesa que consideraba demasiado nacionalista. Por su independencia, en 1946 su reingreso en la CNT se le negó, a pesar de los incondicionales avales de Antonio García Birlán y de Gastón Leval. Unió sentimentalmente con un profesor y escritor danés, del que, en febrero de 1948, tuvo un hijo, Federico, y en septiembre de ese mismo año se divorció, obteniendo la tutela del hijo a pesar de la oposición del padre.

 En los años cincuenta se instaló en París y vivió con el librero ruso Boris, con quien en 1953 tuvo una hija, Claudia, pero quien finalmente la abandonó. Después de varios amantes y de dejar sus hijos en un pensionado, vivió como pudo vendiendo libros de ocasión (bouquiniste) junto al Pont Neuf del Sena. Problemas de salud (deficiente alimentación, insomnio, etc.) Y problemas vitales (penurias económicas, alejamiento de los hijos, imposibilidad de dedicarse a la literatura, etc.) La sumió en una creciente depresión. El 29 de agosto de 1959 murió su hijo Federico, que no se recuperó de la anestesia de una intervención quirúrgica de poco riesgo. Tras dejar a su hija en un pensionado de monjas, intentó en varias ocasiones suicidarse.

 Ada Martín murió el 1 de diciembre de 1960 en París (Francia) a causa de una sobredosis de somníferos, después de una noche de insomnio, delirios y ansiedad, y fue enterrada el 6 de diciembre en el Cementerio Parisino de Thiais (Isla de Francia, Francia). Su hija acabó en un convento de monjas, sin que los compañeros libertarios pudieran impedirlo.

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