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miércoles, 12 de septiembre de 2012

HUELGA EN LA SIDERURGIA ASTURIANA


Los sindicatos convocan dos días de huelga en la siderurgia asturiana

La empresa no dio un paso atrás y los sindicatos lo dieron hacia delante. El último intento para tratar de llevar por la vía del diálogo el duro ajuste que ArcelorMittal quiere implantar en las factorías españolas no sirvió para nada. Poco antes de las tres de la tarde la dirección de la multinacional y los representantes de los trabajadores dieron por concluida sin acuerdo la reunión que había comenzado algo más de una hora antes. Como resultado de ellos la empresa se mantiene firme en la aplicación del ajuste y los sindicatos anunciaron huelga en la siderurgia asturiana.

 La dirección de la empresa comunicó oficialmente a los sindicatos tras la reunión el inicio del proceso para el descuelgue del convenio colectivo y poder así aplicar los ajustes sin acuerdo. Los representantes de los trabajadores respondieron con un calendario de movilizaciones que incluye la convocatoria de dos días de huelga antes de que finalice este mes. El periodo de tensiones que ahora se abre en la siderurgia asturiana tiene un incierto camino. A los malos resultados económicos que prevé la compañía se suma la adopción de decisiones estratégicas para las factorías asturianas como la apertura del alto horno ‘B’ de Gijón, vital para el suturo de la industria en la región.

 El nuevo desencuentro dio paso a que los sindicatos anunciaron un calendario de movilizaciones que prevé dos días de huelga en todas las factorías durante el presente mes. Una de las jornadas de paro de 24 horas tendrá lugar la próxima semana y el otro la siguiente, según confirmaron fuentes sindicales. Las negociaciones ya habían quedado rotas anteayer, pero ayer hubo un último intento de retomarlas, que no fructificó. Los sindicatos mantuvieron que si bien la dirección de la empresa había rectificado en las formas, mantuvo el fondo de la cuestión y no retiró el proyecto de descuelgue del convenio que le permite la nueva legislación laboral española. “Eso no es negociar, sino imponer”, señaló un portavoz sindical.

 El gigante del acero propuso la semana pasada a los sindicatos una congelación salarial durante los próximos tres años, reformar el sistema de primas a la producción para rebajar los sueldos hasta en un 10%, aumentar la jornada laboral en doce días al año y congelar la antigüedad. También comunicó la empresa a los representantes de los trabajadores que si no aceptaban la propuesta antes del próximo día 20 de este mes, la multinacional aprovechará la nueva reglamentación laboral surgida tras la reforma para aplicar el ajuste con acuerdo o sin él. Los sindicatos criticaron, sobre todo, el giro a las relaciones laborales que con esta medida ha impreso la empresa

 La dirección de recursos humanos de ArcelorMittal y los sindicatos se reunieron anteayer y constataron que no había posibilidad de acuerdo. Ayer hubo un intento de acercamiento pero resultó infructuoso porque, según los sindicatos, “la empresa quiere imponer a toda costa las medidas de la reforma laboral y por ese camino se encontrará con una respuesta adecuada”.

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