La sede de CC OO en la Via Laietana en Barcelona. / MARCEL.LÍ SAENZ
CC OO ha despedido a 47 trabajadores y ha aprobado una rebaja salarial del 7% que afectará a todos sus empleados en Cataluña: 300, descontados los despedidos. Así se cerró a finales de marzo el expediente de regulación de empleo (ERE) que presentó a finales de febrero tras una caída de ingresos por causas económicas. Del total de contratos rescindidos, 20 personas se han acogido a baja voluntaria y cinco son prejubilaciones. Respecto a las indemnizaciones, los afectados cobrarán 40 días por año trabajado con un tope de 20 mensualidades.
El ERE de CC OO se ha llevado con gran discreción, tanto de puertas adentro, como con extremo pudor sobre su trascendencia hacia el exterior. Un expediente de regulación no es plato del gusto de nadie, y ha supuesto un trauma en una organización acostumbrada a representar a trabajadores de todo tipo de empresas. Esta vez eran juez y parte. Prueba de la situación creada es que el comité de empresa —que también lo tiene CC OO, como organización que es, y lo integran 16 personas— no ha querido hablar. El comité no tiene presidente y ninguno de los miembros consultados por este diario ha querido valorar el proceso y su resolución. “Se ha cerrado de forma ejemplar”, acceden a afirmar. “Con indemnizaciones a 40 días”, en clara referencia al gesto de la organización con los suyos, después de que la reforma laboral permita despedir con solo 20 días de indemnización.
La portavoz del sindicato, Dolors Llobet, destaca que el ERE “se ha cerrado con acuerdo con los representantes de los trabajadores”, que “no se ha aplicado la reforma laboral” y que “permite adecuar la organización a la realidad de las actuales circunstancias”. Solo en ingresos procedentes de la Generalitat, CC OO ha perdido entre este año y 2011 3,7 millones de euros, recuerda Llobet, una cantidad que suma ayudas directas y recursos para impartir formación continuada, entre otros conceptos.
Aparte de la pérdida de ingresos procedentes de las Administraciones, los sindicatos han perdido fondos como consecuencia de la caída de la afiliación (el 3% en el caso de CC OO) y, sobre todo, de que los afiliados parados pagan una cuota menor. Los miembros del sindicato aportan la principal fuente de ingresos del sindicato, el 60%, explica Llobet. El objetivo del ajuste llevado a cabo por CC OO en Cataluña era ahorrar 1,7 millones de euros anuales, que equivalían a 50 contratos a jornada completa. La dirección habló desde el comienzo de conseguirlo sin tener que prescindir de nadie: con una rebaja salarial o reducciones de jornada voluntarias. Pero, finalmente, presentó un ERE para 65 personas que ha acabado en 47, además de la rebaja de sueldo del 7% para todo el mundo. Esta rebaja afectará también a los sindicalistas que no son plantilla del sindicato pero cobran de CC OO. “Son los que tienen relación de mandato”, aclara Llobet, quien lo ilustra con un ejemplo: un sindicalista que trabaje para el sindicato mientras está en excedencia de su empleo.
El acuerdo que han alcanzado el comité y CC OO establece que de los 65 trabajadores inicialmente afectados, tres quedaron liberadas (son tres empleadas de la limpieza a quienes finalmente se excluyó del ERE), seis han accedido a una reducción de jornada y sueldo “indefinida” —por lo que serán indemnizados— y otros nueve han sido recolocados en “fundaciones y empresas participadas”, señala el acuerdo del ERE. Los destinos de estas recolocaciones son el Gabinete Técnico Jurídico y la Fundación Cipriano García.
La portavoz del sindicato, Dolors Llobet, destaca que el ERE “se ha cerrado con acuerdo con los representantes de los trabajadores”, que “no se ha aplicado la reforma laboral” y que “permite adecuar la organización a la realidad de las actuales circunstancias”. Solo en ingresos procedentes de la Generalitat, CC OO ha perdido entre este año y 2011 3,7 millones de euros, recuerda Llobet, una cantidad que suma ayudas directas y recursos para impartir formación continuada, entre otros conceptos.
Aparte de la pérdida de ingresos procedentes de las Administraciones, los sindicatos han perdido fondos como consecuencia de la caída de la afiliación (el 3% en el caso de CC OO) y, sobre todo, de que los afiliados parados pagan una cuota menor. Los miembros del sindicato aportan la principal fuente de ingresos del sindicato, el 60%, explica Llobet. El objetivo del ajuste llevado a cabo por CC OO en Cataluña era ahorrar 1,7 millones de euros anuales, que equivalían a 50 contratos a jornada completa. La dirección habló desde el comienzo de conseguirlo sin tener que prescindir de nadie: con una rebaja salarial o reducciones de jornada voluntarias. Pero, finalmente, presentó un ERE para 65 personas que ha acabado en 47, además de la rebaja de sueldo del 7% para todo el mundo. Esta rebaja afectará también a los sindicalistas que no son plantilla del sindicato pero cobran de CC OO. “Son los que tienen relación de mandato”, aclara Llobet, quien lo ilustra con un ejemplo: un sindicalista que trabaje para el sindicato mientras está en excedencia de su empleo.
El acuerdo que han alcanzado el comité y CC OO establece que de los 65 trabajadores inicialmente afectados, tres quedaron liberadas (son tres empleadas de la limpieza a quienes finalmente se excluyó del ERE), seis han accedido a una reducción de jornada y sueldo “indefinida” —por lo que serán indemnizados— y otros nueve han sido recolocados en “fundaciones y empresas participadas”, señala el acuerdo del ERE. Los destinos de estas recolocaciones son el Gabinete Técnico Jurídico y la Fundación Cipriano García.
Uno de los puntos del acuerdo del ERE del 23 de marzo incluye que CC OO ponga a disposición de los despedidos un servicio de recolocación externo “para facilitar su reincorporación al mercado de trabajo”. Además, especifica que los empleados de los que se ha prescindido “pasarán a formar parte de una bolsa de trabajo y tendrán preferencia en futuras contrataciones”. El texto incluye que si se produce un ERE en el futuro, “se tomará en consideración el proceso de negociación” llevado a cabo en esta ocasión.
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