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sábado, 26 de noviembre de 2011

¡Silencio, se roba!

Uno ya pensaba que lo peor ya había pasado, pero no, cada día que pasa aparecen nuevos casos de corrupción y robo que indigna a cualquiera con sentido común. La práctica habitual de las cúpulas directivas de bancos y cajas de asignarse sueldos, dietas, bonus y planes de pensiones millonarios de forma unilateral, resulta sangrante cuando hay millones de personas sin ingresos y uno de cada dos jóvenes no tienen empleo.

Está más que claro que no hay gobierno o simplemente si lo hay no cumple con su función, esto es, velar por que no se robe de forma impune como está ocurriendo y habrá ocurrido en los últimos 30 años de "democracia".

¿Cómo se les puede permitir esos sueldos obscenos y desorbitados sin que paguen los impuestos que deberían, esto es al 70% de IRPF, por ejemplo?

Pero no, se les permite que se lleven una millonada, pues papa Estado inyectará liquidez a la caja o banco quebrado, dinero de todos los ciudadanos que no se empleará en crear escuelas, hospitales u otros servicio público.

Todos estos mangantes, sinvergüenzas que roban de forma "legal", están empobreciendo a toda la sociedad, sin que nadie mueva un dedo para evitarlo.

¿Qué hacen los apesebrados dirigentes de los sindicatos UGT y CCOO? Más bien poco o nada.
¿Y qué hace el poder judicial? pues no todo lo que deberían.
¿Y el PP o el PSOE? Nada, lo han permitido y lo permiten, pues no hacen nada para evitarlo, pero bien que saben bajar los salarios y pensiones y subir los impuestos y los bienes de primera necesidad, para recaudar fondos destinados a tapar los agujeros de lo expoliado y robado.
¿Qué opinión tendrán los ciudadanos que asisten a este lamentable y despreciable espectáculo?

Cuando ven como se indulta a un poderoso banquero, pero no a los deshauciados, cuando ven como se desvía dinero de las comunidades balear, valenciana, y catalana hacia un empresa privada, y todo porque su dueño es un consorte real.

Y uno se pregunta, si ahora en época de vacas flacas se sigue robando, que no se habrá expoliado durante el boom de la burbuja inmobiliaria. En fin, qué podiamos esperar de un gobierno que se decía socialista y les quitó el impuesto del patrimonio a los ricos, perdiendo de ingresar más de 2000 millones al año.
Esta por ver si el Sr. Rajoy podrá parar este general latrocinio y expolio cuando forme gobierno, pero mucho me temo, que llueve sobre mojado y será díficil dejar el onmipresente vicio de apropiarse de lo ajeno, a la vista de la permisiva y laxa justicia.

¡Silencio, se roba!

fuente: Kaos

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