Rolls Royce, Audi, Cadillac... el secreto de los coches de
Casa Real
Izquierda Unida, ERC, UPyD se dieron este martes contra un
muro. La Comisión de Presupuestos del Congreso debatió y tumbó las enmiendas
presentadas por todos ellos para reducir la partida de la Casa Real para 2014.
El Gobierno de Mariano Rajoy ha cifrado ésta en 7,75 millones de euros frente a
los 7,93 millones del actual ejercicio, con lo que encadena cuatro años de
bajadas.
Los de Cayo Lara, los más ambiciosos, pedían que el hachazo
a Zarzuela fuera del 30% para equipararlo al que según los sindicatos sufrido
por los funcionarios. Les salió al paso el portavoz del PP en la Comisión, Juan
Manuel Albendea, quien aseguró que la Monarquía española es "la más
austera" del mundo y cifró en 17 céntimos su coste medio para cada
ciudadano.
Saber en qué se gasta el dinero la Casa del Rey es
imposible. Por más que desde hace dos años, con los primeros coletazos del Caso
Nóos, Don Juan Carlos accediera a publicar en la página web un desglose de
apenas un folio. Éste habla, sin detallar, de los gastos corrientes, de
personal, y de las asignaciones al Rey, el Príncipe Felipe y el resto de la
Familia Real.
En verano Zarzuela vendió a la opinión pública la renuncia
al yate Fortuna como un ahorro. Ésa es la cara, pero la cruz es que su parque
móvil sigue costando un buen pico. La Casa ha hecho números y prevé gastarse en
los dos próximos años en torno a 545.500 euros solamente en el mantenimiento
-combustible aparte- de la flota de vehículos oficiales en los que
habitualmente se trasladan Don Juan Carlos, Doña Sofía y los Príncipes de
Asturias.
Así queda de manifiesto en un concurso recién convocado por
la Jefatura de Administración Económica del Cuarto Militar de S.M. el Rey y
Guardia Real para el suministro de repuestos originales de carrocería y
accesorios de toda la flota. En los pliegos, consultados por El Semanal
Digital, figuran al detalle los vehículos que la componen, un inventario hasta
ahora desconocido.
En la lista de los
ligeros los hay de capricho, todoterrenos y otros más modestos, estos últimos
los destinados al personal de seguridad. Concretamente la forman Rolls Royce
-quién no recuerda la imagen de Doña Letizia a bordo de una de esas joyas el
día de su boda-; Cadillac; Audi A6; Mercedes S-350 y 500 SEL; Peugeot 407 SW,
407 SR, 406 ST, 308 Sport, Allur y SW Sport, 307 XT y XS, 207 X-Line, Partner,
Combi y Expert; Land Rover Defender; Santana Anibal; Nissan Navarra, PickUp,
Patrol, Terrano II y Pathfinder; y Opel Vectra.
En la relación de vehículos pesados hay furgones,
microbuses, autobuses y camiones de las casas Mercedes Benz e Iveco Pegaso y
Nissan Atleon, entre otros.
Es de sobra conocido que entre las debilidades del Rey los
coches y la velocidad ocupan un lugar privilegiado. De hecho algún susto que
otro se ha llevado, como cuando tuvo un accidente junto a su hija Cristina por
pisar más de la cuenta el acelerador de un flamante Porsche 959 plateado que le
había regalado un grupo de empresarios.
Sin embargo, los vehículos que forman parte de la colección
personal de Don Juan Carlos, como algún que otro Ferrari, están a salvo de fisgones.
Nadie sabe cuántos ni cuáles son y mucho menos los gastos que acarrean.
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